ICAL
El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, exigió hoy al Gobierno que apueste por “mejorar la competitividad del sector agrario, uno de los más afectados por los aranceles y por el incremento de proteccionismo a nivel mundial”. Esta exigencia la lanzó a su llegada a las Conferencias Sectoriales de Pesca y de Agricultura y Desarrollo Rural y al Consejo Consultivo de Política Agrícola para Asuntos Comunitarios, donde representa a la Junta en sustitución de la consejera del ramo, María González Corral. Una cita que llega marcada por las denuncias de los Gobiernos autonómicos del PP que consideran que el Ministerio de Agricultura “ha desatendido a las comunidades en el nuevo escenario internacional arancelario”, por lo que han unido las voces regionales “para solicitar más colaboración y diálogo porque, a su juicio, el sector primario está en un grave peligro”, ya que subrayan que las medidas propuestas por el Ejecutivo de Sánchez son “absolutamente insuficientes”.
Según explicó Carriedo, para mejorar la competitividad de los productos nacionales, y concretamente los de Castilla y León, en los mercados internacionales es necesario incidir en tres demandas al Ministerio: “Mejorar las infraestructuras agrarias, que sirven para reducir costes a los agricultores, empezando por el regadío que está demostrado que es un factor de competitividad muy importante; reducir los costes a través de las infraestructuras energéticas, ya que es un factor de competitividad, y reducir los impuestos que se han visto incrementados en los últimos años para los agricultores y ganaderos”.
Estas tres cuestiones aparecen reflejadas en el Plan de Competitividad, registrado por el PP en el Congreso hace unas semanas, que los Gobiernos autonómicos del PP quieren que se aplique en toda España en lo relativo, precisamente, a la rebaja de los impuestos a la energía, la reforma de la fiscalidad agraria y más inversión en regadíos.
“Nuestra idea es que el ministro pueda reflexionar, escuchar y apostar por un sector agrícola, ganadero y agroalimentario que sea competitivo”, resaltó Carriedo que se mostró confiado en que el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, tenga en cuenta la posición de Castilla y León, “quizá la Comunidad más importante de España desde el punto de vista de la calidad de los productos agroalimentarios”. “Creemos que merecemos ser escuchados no solamente como comunidad autónoma, sino también nuestros agricultores y ganaderos que demandan un Ministerio sensible a sus intereses”, subrayó el consejero de la Junta.
En principio, y salvo sorpresa, las Conferencias Sectoriales de Pesca y de Agricultura y Desarrollo Rural servirán para aprobar la distribución entre las comunidades autónomas de más de 200 millones de euros para la financiación de diversas líneas agrícolas y ganaderas, así como para la cofinanciación de los Programas de Desarrollo Rural de las comunidades autónomas. En este sentido, Castilla y León está previsto que reciba 30,7 millones del total, de los cuales 28,46 estarán destinados a los Programas de Desarrollo Rural.