Impulsar la financiación alternativa y el respaldo a las pymes a través de sociedades de garantía como Iberaval. Éste ha sido el contenido esencial de la reunión que mantuvieron esta mañana en Valladolid el presidente de la SGR de Castilla y León y La Rioja, César Pontvianne, y la consejera delegada de la Compañía Española de Reafianzamiento (CERSA), Ana Vizcaíno, en la que fue la primera toma de contacto entre ambos.
Pontvianne puso sobre la mesa que Iberaval presta servicio a más de 28.000 pequeñas y medianas empresas de todos los sectores, que, a través de su financiación, han podido materializar proyectos que, en muchas ocasiones, de otra manera no habrían formalizado, y han accedido a unas condiciones más ventajosas ante sus entidades financieras.
De igual manera, se refirió al avance logrado por la SGR, que ya representa en torno al 20 por ciento de todo el Sistema Nacional de Garantías, con un Riesgo Vivo por encima de los 800 millones de euros y una formalización anual de avales que supera los 300 millones de euros.
La consejera delegada de CERSA, Ana Vizcaíno, sociedad estatal adscrita al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, destacó la función que presta esta entidad, que se encarga de reavalar las operaciones que aprueban las SGR.
“En los últimos años el papel de sociedades de garantía como Iberaval ha resultado clave para miles de iniciativas empresariales en toda España”, indicó Vizcaíno, quien subrayó el “efecto multiplicador” de cada euro que inyecta el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo en el capital de CERSA, dado que “se multiplica por 50 en la financiación a las pymes”.
En este contexto, César Pontvianne puso en valor el apoyo, “muchas veces desconocido para la opinión pública”, que aportan organismos como CERSA, diseñado ex profeso para dar cobertura a las pequeñas y medianas empresas y los autónomos españoles.
Ambos representantes destacaron la importancia de que las sociedades de garantía, en la línea mantenida por Iberaval en los últimos años, ganen tamaño para resultar más útiles a las empresas y valoraron la cada vez mayor participación de los socios partícipes (empresas) en el capital de la SGR, junto a los socios institucionales, para tener un desarrollo adecuado.
César Pontvianne incidió en que el avance de las SGR debe ir acompañado también del crecimiento en el tamaño de las empresas españolas, una cuestión crucial para la que, a su entender, deben buscarse soluciones: “Las pymes necesitan SGR más fuertes, solventes y capitalizadas para garantizar operaciones de préstamo que faciliten esa transición hacia empresas mayores”.
Por último, la consejera delegada de CERSA reconoció el esfuerzo llevado a cabo por Iberaval en los últimos años para adaptarse a las necesidades concretas de las pymes, a partir de pautas ejecutivas que se han ido incorporando al llamado contrato de reafianzamiento -acuerdo de carácter anual que se firma con las SGR- con productos ajustados a la realidad de las pymes en cada momento.