Anticorrupción estudia la primera querella contra PwC y la ex cúpula de Banco Popular

Anticorrupción estudia la primera querella contra PwC y la ex cúpula de Banco Popular

14 julio, 2017
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Actualizado: 14 julio, 2017 10:04
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La Fiscalía Anticorrupción estudia la primera querella presentada ante la Audiencia Nacional contra Ángel Ron, ex presidente del Popular, y la auditora PwC.

La querella proviene de la OCU y señala a Ron, al ex consejero delegado Pedro Larena, al vicepresidente Roberto Higuera y a la auditora PwC. En caso de que Anticorrupción encontrara indicios de delito, sería el juez Fernando Andreu quien se encargue del juicio, según recoge La Información.

El fiscal designado será Antonio Romeral, quien está inmerso en la causa de la contabilidad B del PP. Aún debe dar su informe la Fiscalía Anticorrupción para conocer si admite o no la querella de la asociación de consumidores. En este sentido, la querella se centra en las cuentas de 2016, rectificadas, pero no reformuladas por el consejo presidido por Emilio Saracho, quien aprobó a su vez las cuentas de Ángel Ron, Pedro Larena y Roberto Higuera.

La querella se presenta para que la Audiencia Nacional dirima responsabilidades, al tiempo que se pida toda la información que conllevó la resolución del Popular, aunque Bruselas ya ha descartado difundir el polémico informe provisional de Deloitte, así como la decisión de vender, una vez liquidado Banco Popular, la entidad financiera a Banco Santander por un euro.

Asimismo, también se tratará de indagar si el folleto de la ampliación de capital de Banco Popular realizada entre mayo y junio del pasado año reflejaba la imagen fiel, por lo que se pedirá también explicaciones a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Por este motivo, Banco Santander emitirá 980 millones de euros en deuda perpetua convertible y amortizable para tratar de dar solución a los accionistas minoritarios.

PwC encontró deficiencias en las cuentas de 2016, como una falta de provisiones y desajustes por valor de 694 millones. No obstante, el consejo de Saracho aseguró que estos ajustes apenas tenían incidencia en los resultados, por lo que no procedió a reformular las cuentas. Pero a este montante se aferra la OCU para señalar que las cuentas de la entidad financiera no reflejaban su imagen fiel.

Con la resolución del Popular, 305.000 accionistas junto con los bonistas perdieron toda su inversión en la noche del 6 al 7 de junio. Toda esta información podrá utilizarse en otras querellas y demandas.

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