Barry White Jr, el profesor que revoluciona las redes con su saludo a los alumnos

Barry White Jr es un profesor que saluda a los alumnos con un código diferente con el fin de motivarles. El saludo personalizado a sus 40 alumnos tiene ya 90 millones de visitas en pocos días.

Barry White Jr, profesor de inglés de Charlotte (Carolina del Norte) muestra su cercanía a los alumnos. Sus saludo no se limitan al tradicional buenos días o un hola, sino que es un código propio, como el que tienen amigos íntimos y que solo ellos conocen. Cada uno de los 40 alumnos tiene su propio código.
«Ellos saben que cuando llegan a la puerta de entrada tenemos que hacer el saludo«, ha afirmado este excéntrico profesor a ABC News, que ha colgado en la red social este vídeo, contando ya con 90 millones de reproducciones. Tras realizar el saludo, los alumnos están más motivados y les entra energía, ha considerado.
Para acordarse de cada uno de los 40 saludos diarios, el profesor recurre a la «memoria muscular». «Lo hago mucho con ellos. Les encanta, vienen a mí y lo hacemos. Sólo sé los ciertos movimientos que van con ciertos niños porque es personalizado», ha explicado. «Por ejemplo, empecé un equipo de pasos en la escuela. Algunos de mis alumnos de 5º grado que enseño están en ese equipo de pasos y notarás que damos un paso en sus apretones de manos», ha comentado.

Inspirado en Lebron James

Un fanático de Cleveland Cavalier, White se inspiró para hacer los apretones de manos con sus estudiantes después de darse cuenta de su jugador de baloncesto favorito, LeBron James, haciendo lo mismo con sus compañeros de equipo.
«Usted ve ese vínculo y lo cerca que están», dijo de los Cavs. «Quería llevar ese sentimiento a todo el quinto grado».
Su administración ama el entusiasmo que White trae a sus estudiantes cada día.
Todo este ritual de entrada a clase comenzó con un simple apretón de manos con un alumno. «Siempre me esperaba cada mañana antes de que entraba en clase«, ha explicado. Este alumno llegaba incluso tarde a la clase sino recibía su apretón de manos, una muestra de confianza muy poco convencional entre profesores y alumnos.
El saludo se fue propagando como la pólvora entre sus alumnos, incluso despertando envidia sana de quienes recibían este divertido saludo. Empezó con dos más y al poco tiempo llegó a sus 40 alumnos. El saludo amenaza con llegar a otros alumnos de otras clases.