Castilla y León y Cantabria renuevan el acuerdo sobre urgencias y otros servicios públicos

ICAL

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, formalizaron hoy en Santander la firma de un convenio colaboración para mejorar la prestación de servicios públicos comunes y desarrollar actuaciones conjuntas en beneficio de las personas, especialmente en las zonas fronterizas de Burgos, León y Palencia.

Durante su comparecencia para la presentación del protocolo, que incluye 23 áreas de actuación, Fernández Mañueco y Sáenz de Buruaga subrayaron el nuevo impulso en la relación de ambas comunidades vecinas desde la defensa del estado de las autonomías leal y constructivo y también de su contribución al desarrollo de España.

En concreto, en el área de atención sanitaria, se va a firmar un convenio específico que beneficiará en total a más de 13.000 personas y recogerá la atención en el Hospital Tres Mares de Reinosa a la población de las zonas básicas de salud de Aguilar de Campoo y Cervera de Pisuerga, en Palencia, y del Valle del Valdebezana, en la provincia de Burgos. Esto incluye urgencias, hospitalización, consultas externas, pruebas diagnósticas o terapéuticas y hospitalización de día y la posibilidad de derivación al Hospital Marqués de Valdecilla de Santander en patologías tiempo dependientes como ictus o infarto. A cambio, Castilla y León prestará atención primaria en el centro de salud del Valle de Valdebezana a seis localidades cántabras.

Ambos dirigentes defendieron que las fronteras administrativas no deben ser un obstáculo para atender a las personas, familias y empresas. Por eso, y con el objetivo de “generar oportunidades y aumentar la protección de los ciudadanos”, ambas administraciones han dado el paso de impulsar este protocolo que se irá desarrollando en un marco de cooperación territorial y que tiene diferentes áreas de actuación.

Para Fernández Mañueco este acuerdo permitirá mejorar la atención sanitaria, potenciar la colaboración en servicios sociales, reforzar la atención a la dependencia y colaborar en materias de interés común, como la lucha contra la violencia de género. “Queremos intensificar la relación entre ambas comunidades. Con este gesto, fortalecemos los lazos para mejorar la calidad de vida de las personas a las que servimos y contribuimos al desarrollo y al progreso de nuestro país”, aseguró.

Por su parte, la presidenta cántabra anunció que se trata del “perfecto punto de partida teniendo en cuenta que Castilla y León es un espejo donde mirarse por su pujanza y capacidad de desarrollo”. “Los cántabros y los castellanos y leoneses no entienden de fronteras cuando se trata de la prestación de servicios. Nada genera más confianza que ser capaces de construir consensos y eliminar barreras poniendo siempre por delante a las personas”, remarcó Sáenz de Buruaga.

Ambos dirigentes coincidieron en que, aunque el acuerdo está especialmente avanzado en materia sanitaria, las dos autonomías trabajarán de manera conjunta en otros ámbitos como, por ejemplo, el educativo. De hecho, con la firma de este protocolo se permitirá escolarizar al alumnado de todas las familias de localidades limítrofes que solicitan plaza y colaborar en formación del profesorado y en Formación Profesional. “Estaremos a disposición de todo aquel alumnado que quiera venir a estudiar a Castilla León”, remarcó Fernández Mañueco.

En relación a la cooperación en materia medioambiental, el convenio impulsará la coordinación en emergencias y en la prevención y lucha contra los incendios forestales así como en actuaciones compartidas de conservación de especies como el oso o el urogallo.

Respecto al ámbito de cultura y turismo, se van a reforzar los vínculos para impulsar el patrimonio y la promoción cultural. Además, ambas comunidades van a aunar esfuerzos para impulsar atractivos como los Caminos Lebaniegos y de Santiago, la arquitectura de Gaudí, el arte rupestre, el Románico o los espacios naturales de la Comunidad como son el Parque Nacional de Picos de Europa, el Parque Natural de Hoces del Alto Ebro y Rudrón, en Burgos, y el futuro Monumento Natural de Covalagua y Las Tuerces, en Palencia.

Castilla y León y Cantabria van a cooperar también para potenciar el transporte, los enclaves logísticos, el Corredor Atlántico y otras infraestructuras de comunicación. Asimismo, van a unir fuerzas para continuar defendiendo los intereses comunes en el equilibrio del lobo, financiación autonómica y en la lucha contra la despoblación. “Son aspectos que exigiremos. Los reivindicaremos juntos antes el Gobierno de España”, afirmó el presidente de la Junta.

En Protección Civil se considera “prioritario” desarrollar los mecanismos de cooperación en la elaboración de protocolos de atención de llamadas de urgencia a través del servicio de emergencias 1-1-2 y de coordinación en la gestión de búsqueda y rescate de personas. También se apostará por una colaboración activa en la formación de personal a través de cursos y jornadas.

En materia de I+D+i, ambas administraciones están de acuerdo en buscar sinergias para desarrollar las Agendas Digitales de ambas comunidades y potenciar su digitalización, así como la confianza de la ciudadanía en las nuevas tecnologías.

En materia energética, su intención es colaborar con programas de ayudas en materia de eficiencia energética y favorecer la promoción de la movilidad eléctrica. En acción exterior, ambos territorios muestran su disposición por mantener la acción conjunta sobre diferentes temas europeos, incluyendo el reto demográfico, las redes transeuropeas de transporte, telecomunicaciones y energía, la defensa de los intereses agrícolas y medioambientales comunes o la política de cohesión de la UE.

Respecto a la prestación de servicios sociales y atención a las personas, este protocolo va a suponer la colaboración en el desarrollo del Sistema de Atención a la Dependencia especialmente en la utilización de recursos en las zonas limítrofes y también, en el intercambio de información en lo referente a experiencias y buenas prácticas de atención. Además, se establecen iniciativas para facilitar la integración y el intercambio en los programas para mayores puestos en marcha por ambas comunidades.

En cuanto a la promoción de la igualdad entre mujeres y hombres, y con el objetivo de prevenir la violencia machista, se va a colaborar para compartir conocimientos y experiencias en esta materia y se va a fomentar el emprendimiento de mujeres en el mundo rural con actuaciones conjuntas.

En materia de emigración y retorno, promoviendo programas conjuntos dirigidos a cántabros y castellanos y leoneses en el exterior, se establecerán líneas de actuación para facilitar o promover el retorno, servicios de información a la ciudadanía de ambas comunidades así como una red de colaboradores.

Por último, las dos comunidades colaborarán en consumo y comercio, compartirán estrategias y programas de prevención de adicciones relacionadas con el juego, impulsarán la simplificación administrativa y reforzarán la atención al ciudadano o la cooperación al desarrollo a través de líneas de trabajo que permitan mejorar la calidad de vida en países empobrecidos y generar procesos de desarrollo sostenible.

“Con este acuerdo reforzamos el estado autonómico pero siempre, con espíritu constructivo y leal con la Constitución. Lo haremos respetando las diferencias entre ambas comunidades pero desde la creencia de que nuestra apuesta por los servicios públicos contribuirá al desarrollo conjunto de la nación”, concluyó el presidente de la Junta de Castilla y León.