Cuatro firmas se incorporan al ‘lobby’ del hidrógeno H2CYL
“Nuestro objetivo es impulsar la economía del hidrógeno en Castilla y León como vector económico, así como impulsar proyectos que lo generen, empresas que lo consuman apostando por la descarbonización y otras que desarrollen tecnologías ligadas a toda su cadena de valor”. Con estas palabras definió hoy el presidente de la Asociación Castellano y Leonesa del Hidrógeno, Rafael Barbero, las metas de la misma.
La Asociación celebró hoy en la ciudad de León su primera asamblea general, en la que se aprobó una junta directiva que “refleja la pluralidad de los asociados” y ala que se han incorporado, además de los socios fundadores, las empresas 1A Ingenieros, Tresca y Grupo Ibereólica, “que van a desarrollar proyectos en el ámbito del hidrógeno renovable” y el Centro Tecnológico Cartif, que “ya tiene proyectos en desarrollo”.
Para Barbero, la aprobada hoy, supone una junta directiva “con mucho más conocimiento para potenciar la economía del hidrógeno en Castilla y León”. Una Comunidad Autónoma a la que definió como “una de las que más potencial tiene a la hora de desarrollar una economía ligada al hidrógeno”, algo que cuenta con unas “expectativas impresionantes”.
La Asociación Castellano y Leonesa del Hidrógeno cuenta en estos momentos con un total de 53 asociados, entre los que se encuentran centros de conocimiento y universidades, empresas privadas, personas físicas que quieren estar al tanto de las últimas novedades y entes públicos, como el Ente Regional de la Energía y ayuntamientos que quieren que en sus municipios se impulsen proyectos.
En este sentido, el director general de Energía y Minas y director del Ente Regional de la Energía, Alonso Arroyo, se refirió a H2CYL como “un claro ejemplo de colaboración público privada entre empresas, instituciones, organismos científicos y personas de diferentes ámbitos relacionados con el energético ante uno de los retos más apasionantes de las próximas décadas”, como es “cambiar las formas tradicionales de generar energía por un nuevo vector que ofrece posibilidades muy amplias”.
Alonso Arroyo destacó que Castilla y León cuenta con “una tradición larga de generación energética”, así como con “experiencia y capacidades para desarrollar la economía del hidrógeno”, respecto a la que “todavía quedan bastantes retos”. Entre ellos, aludió al “posicionamiento de la región como capacidad de generación de energía” y al “asentamiento del consumo y la cadena de valor”.
“El gran objetivo y el gran reto en el ámbito energético es seguir siendo un referente en generación energética y en creación de empleo ligado a ello”, afirmó el director del EREN, al tiempo que apostó por “conseguir que la generación energética se consuma aquí y que el empleo se pueda generar en los territorios donde se produce”. “El hidrógeno es todavía una puerta a abrir, por lo que hay que estar posicionados ante los organismos nacionales y las instituciones comunitarias que apuestan por descarbonizar la economía y hacer de la generación energética un verdadero potencial”, concluyó.