CVE lamenta las políticas pasivas de la Junta y pide medidas activas contra la pandemia

La Confederación Vallisoletana de Empresarios (CVE) pidió hoy a la Junta una reflexión sobre la posibilidad de aplicar políticas activas contra la pandemia del covid-19 que permitan retomar la economía de forma “rápida y segura”. Así, la patronal consideró “prioritario” que la Administración permita “avanzar en la desescalada y en la economía”. Para ello, aconseja al Gobierno regional “salir de una posición cómoda de medidas pasivas para combatir la pandemia, como puede ser el mantener confinada a la sociedad e hibernar la economía”.

La patronal realiza esta petición después de que la consejera de Sanidad, Verónica Casado, anunciara que propondrá al Gobierno que entren en fase 1 áreas de salud que tengan tres o menos casos de coronavirus, con test molecular por cada 10.000 habitantes en los últimos catorce días, y uno o menos en los últimos siete.

Se trata de dos de los criterios epidemiológicos que seguirá Castilla y León para proponer nuevas zonas de salud que se sumen a las 26 que llevan desde el lunes en fase 1 y a las 14 que entraron fuera de plazo, y que ya ha transmitido al Ministerio de Sanidad.

Al respecto, CVE se preguntó cómo quedaría la tasa de enfermos de las diferentes áreas de salud si en su cálculo se excluyeran los datos de focos de riesgo, como pueden ser las residencias de ancianos, puesto que “no es sociedad productiva que vaya a incorporarse a puestos de trabajo”. Del análisis de los datos que proporciona la Junta, CVE tiene la sospecha de que el número de fallecidos por covid-19 en residencias “son los que están provocando que las áreas de salud estén por encima del criterio que se ha marcado la Junta”.

Los empresarios se alinean con la necesidad de salvaguardar de forma “prioritaria la salud y la seguridad” de los ciudadanos, pero “tener criterios más restrictivos y avanzar de forma más lenta que otras comunidades autónomas en la desescalada va a traer graves consecuencias para la economía en términos de pérdida de competitividad”. “Ello dejará a nuestras empresas en clara desventaja frente a otras regiones, acompañado, previsiblemente, de un incremento de empresas cerradas y ciudadanos en el desempleo”, advirtió en un comunicado.

En este punto, recordó que Madrid da por hecho que pasará a la fase 1 al haber contratado a más sanitarios y técnicos, además de haber aumentado su capacidad para hacer pruebas PCR; y que Comunidad Valenciana, Andalucía o Castilla-La Mancha han solicitado que pasen las provincias o departamentos que se quedaron fuera hace una semana. Por el contrario, señaló CVE, Castilla y León aplica criterios “más restrictivos, desescalando por zonas básicas de salud en lugar de por provincias, y sólo se pide avanzar en aquellas con tres o menos casos por 10.000 habitantes y uno o ninguno la última semana”.