La desigualdad de los españoles en la declaración de la Renta
Ā«Los espaƱoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o socialĀ«. AsĆ reza el artĆculo 14 de la Constitución, sistemĆ”ticamente incumplido por las administraciones. Y es que, segĆŗn la CC AA de residencia, un contribuyente pagarĆ” mĆ”s o menos por el mismo grado de ingresos o riqueza.
Tal es la desigualdad, que, por ejemplo, un madrileƱo con un patrimonio de 700.000 euros no tributa en Madrid, pero sĆ que tenga que pagar mĆ”s de 400.000 euros en Extremadura. Esta desigualdad manifiesta tambiĆ©n se da en el impuesto de la Renta sobre las Personas FĆsicas, el IRPF, una parte del mismo se ha transferido a las CC AA que aplican tipos muy diferentes, del 43% en el tramo mĆ”s alto en Madrid al 48% en CataluƱa o Baleares. Los tramos mĆ”s bajos tambiĆ©n se desvĆan, hasta dos puntos y medio, del 19% al 21,5%. Es decir, se tributa de forma distinta segĆŗn el lugar de residencia. Las grandes fortunas sĆ pueden jugar a este pulso fiscal donde Madrid es la lĆder por excelencia, al tener los impuestos mĆ”s bajos, no corren la misma suerte quienes tienen su patrimonio anclado en otras CC AA y pueden hacer frente a los costes de trasladarlo a la capital.
La situación afecta a todas las familias incluso en las deducciones, donde cada Comunidad Autónoma ha escogido a su antojo los lĆmites. AsĆ, para poner de manifiesto esta desigualdad, el Consejo General de Economistas, los asesores fiscales y la patronal empresarial realizó un documento detallado sobre todos los impuestos donde entran en juego las CC AA bajo el tĆtulo ‘Panorama de la fiscalidad autonómica y foral 2016’, en Ć©l se denuncia este desequilibrio y de este estudio, NEGOCIOS.COM ha recogido todas las deducciones fiscales en el IRPF en cada CC AA. Hay numerosas, pero no en todas las CC AA se aplican, ya que se imponen los criterios propios del Gobierno de turno. La legislación es cambiante y casi nunca es para tratar de aliviar a familias y empresas, sino para tratar de saquear aĆŗn mĆ”s los bolsillos.
Los empresarios estÔn «asfixiados» y adecuarse a las normativas de los gobiernos incrementa de forma innecesaria el coste para las empresas. «En el futuro nadie va a retener a nadie en ningún sitio y serÔ muy importante tener impuestos adecuados«, afirmó el presidente de la CEOE en la presentación del estudio que sirve para denunciar este «batiburrillo» de impuestos ineficiente.
Esta es la guĆa de las deducciones fiscales por CC AA, un ejemplo mĆ”s de las desigualdades entre espaƱoles: