Diputación de Salamanca y Unicaja adelantan a los municipios 34 millones de la recaudación tributaria
ICAL
Unicaja y la Diputación de Salamanca suscribieron este lunes una operación de tesorería en forma de cuenta de crédito, con un límite disponible de 34 millones de euros, para poner a disposición de los ayuntamientos de la provincia la recaudación prevista de sus tributos en este ejercicio de 2024. El presidente de la institución provincial, Javier Iglesias, junto a los representantes de Unicaja Manuel Rubio, director de Banca Comercial de Castilla y León Sur, y Cristina Sánchez, gestora de Negocio Institucional de Castilla y León, rubricaron hoy el acuerdo.
Según informó la entidad financiera mediante un comunicado remitido a Ical tras el acto de firma, la finalidad de esta operación, que se incrementa en dos millones de euros con respecto al ejercicio pasado, es atender los anticipos a las entidades locales que el Organismo Autónomo de Recaudación y Gestión Tributaria de la Diputación de Salamanca (Regtsa) tiene comprometidos sobre los tributos cuya competencia de gestión y recaudación le ha sido delegada por los 362 ayuntamientos de la provincia, facilitándoles disponer de liquidez desde principios de año y durante todo el ejercicio.
Con la formalización del acuerdo con Unicaja, se contempla una primera disposición, correspondiente a los anticipos del primer cuatrimestre de 2023, por un importe de 17 millones de euros. Por su parte, Regtsa reembolsará las cantidades anticipadas, hasta un máximo de 34 millones de euros a la entidad bancaria antes del 31 de diciembre de este año.
A las condiciones financieras de la operación ofrecidas por Unicaja, previo proceso de licitación pública, se suma que dicha entidad será la responsable de la gestión de cobro de los más de 780.000 recibos domiciliados en el Regtsa de la Diputación entre todas las entidades bancarias, así como la gestión de las devoluciones de estos recibos, de forma que el organismo autónomo de recaudación sólo tendrá como interlocutora a la entidad adjudicataria.
Javier Iglesias subrayó la importancia de “poner a disposición de los ayuntamientos, más cuando su capacidad económica es limitada, herramientas financieras de liquidez que faciliten su gestión diaria y la prestación de los servicios a sus ciudadanos”.
A este respecto, señaló que la idoneidad de esta medida es la evolución experimentada en los anticipos realizados desde Regtsa en cada ejercicio anual, pasando de los 45,6 millones de euros en el año 2020 a los más de 50 millones de euros del año 2023.
Por su parte, Manuel Rubio, director territorial de Banca Comercial en Castilla y León Sur de Unicaja, subrayó el “compromiso” de la entidad con la región, sus provincias y sus instituciones, y mostró su ofrecimiento a la Diputación y los distintos ayuntamientos para “satisfacer sus necesidades de financiación” y para “cubrir otro tipo de servicios financieros”.