Donald Trump y Kim Jong-un celebrarán una reunión histórica en mayo
El presidente de EE UU, Donald Trump, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, celebrarán una reunión histórica en mayo, previsiblemente será en China o la frontera entre ambas Coreas, aunque aún no está confirmado el lugar. Las Bolsas asiáticas, al alza tras conocerse el encuentro.
La reunión se centrará en la desnuclearización de Corea del Norte. Emisarios surcoreanos han viajado este viernes a Washington para entregarle a Trump el mensaje que les confió este lunes en Pyongyang Kim Jong-un: su deseo de reunirse con el presidente estadounidense «lo antes posible». Para iniciar la negociación con Trump, el líder norcoreano ofreció suspender sus ensayos nucleares y de misiles balísticos y también se mostró dispuesto a abordar la desnuclearización de la península de Corea.
Trump ha aceptado la reunión que le había ofrecido Kim Jong-un, que será, de producirse finalmente, el primer encuentro de la historia entre mandatarios de Estados Unidos y Corea del Norte. «El presidente Trump agradeció la reunión informativa y ha asegurado que se reunirá con Kim Jong-un en mayo para lograr una permanente desnuclearización», según ha anunciado el jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Corea del Sur, Chung Eui-yong, quien ha liderado la delegación surcoreana.
Estados Unidos no concretó todavía el lugar de la reunión, pero una posibilidad es que ocurra en la frontera intercoreana, al ser considerado territorio neutral. De hecho, Kim Jong-un se reunirá en abril en esa misma zona con el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, según acordaron los emisarios surcoreanos este lunes en Pyongyang.
Corea del Norte promete «dejar de despertar» con misiles a los vecinos del Sur
Poco después de anunciarse el acuerdo, Kim Jong-un ha prometido «dejar de despertar» a Corea del Sur con nuevos lanzamientos nocturnos de misiles. «Durante el periodo en el que estuvimos realizando repetidos lanzamientos de misiles, el presidente Moon trabajó de manera incansable encabezando las reuniones del Consejo de Seguridad Nacional al alba», ha afirmado el líder norcoreano. «Hemos decidido dejar de despertar al presidente Moon», añadió en tono jocoso el mariscal norcoreano, según recoge un comunicado enviado este viernes por la oficina presidencial de Seúl.
Kim Jong-Un, el líderde Corea del Norte en una imagen con un submarino al fondo
En el tono «distendido y cordial» en el que se celebró la cena, Kim alabó el buen recibimiento que tuvieron en febrero sus delegados cuando viajaron al Sur para los Juegos Olímpicos de Invierno y se disculpó por no poder alojar al grupo surcoreano en una conocida residencia de invitados de Pyongyang porque «está de reformas». El líder norcoreano le dijo también al grupo que si el presidente Moon «mantiene la comunicación» con él, la crisis en la península coreana «se solventará fácilmente».
Corea del Sur elogia a Trump y Jong-un
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, ha elogiado a ambos mandatarios ya que esta reunión supone un «hito histórico». «El encuentro de mayo se documentará como un hito histórico que hizo posible la paz en la península coreana» y aseguró que si Trump y Kim «se reúnen tras una cumbre intercoreana, la desnuclearización completa de la península de Corea se pondrá en el camino correcto». Jae-in ha ensalzado el «coraje y sabiduría» de los líderes de Washington y Pyongyang y, en particular, dijo que «el liderazgo del presidente Trump, quien gustosamente aceptó la invitación del líder Kim, recibirá los elogios no sólo de la gente del Sur y del Norte, sino también de la gente de todo el mundo». El jefe del Gobierno surcoreano añadió que Seúl también intentará aprovechar esta oportunidad, «que se ha presentado como un milagro«.
Se podría poner fin a una guerra de más de 60 años
En la Casa Blanca, Chung Eui-yong mostró el optimismo compartido con Trump sobre «proseguir un proceso diplomático para probar la posibilidad de una resolución pacífica» al conflicto con Corea del Norte. Técnicamente, ambas Coreas están en guerra desde 1953, por lo que de conseguirse un acuerdo se podría poner fin a este episodio.
El emisario de Seúl también advirtió que Corea del Sur, EE.UU. y el resto de aliados mantendrán «la presión» diplomática y económica «hasta que Corea del Norte cumpla sus palabras con acciones concretas».
Una idea que después reforzó Trump en un mensaje en su cuenta de Twitter: «Estamos haciendo un gran progreso pero las sanciones se mantienen hasta alcanzar un acuerdo. ¡Planeando la reunión!. Asimismo, el presidente estadounidense se congratuló de que Kim Jong-un haya ofrecido un diálogo previa suspensión del programa de misiles nucleares y balísticos y que también haya puesto sobre la mesa su desnuclearización.
Las sanciones han provocado el cambio de actitud de Pyongyang
Washington considera que las sanciones han provocado el cambio de actitud de Pyongyang y manteniéndolas pretende evitar que se repita el fracaso de hace una década de las llamadas conversaciones a seis bandas para la desnuclearización -en las que participaban las dos Coreas, EE.UU., China, Rusia y Japón-.
Estas negociaciones quedaron oficialmente suspendidas en 2009 después de que Pyongyang pusiera todo tipo de trabas para que se verificara el estado real de su arsenal e instalaciones nucleares.
El actual deshielo protagonizado inicialmente por las dos Coreas empezó durante los Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en la ciudad surcoreana de Pyeongchang a raíz del mensaje de Año Nuevo de Kim Jong-un, en el que tendió la mano a Seúl.
Corea del Norte canceló una reunión con Pence en el último momento
Precisamente en Pyeongchang, EE UU y Corea del Norte habían concertado una reunión secreta en la que iban a participar el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, y Kim Yo-jong, hermana de Kim Jong-un. Sin embargo, Pyongyang canceló el encuentro en el último minuto a raíz de las duras declaraciones de Pence sobre Corea del Norte durante el viaje.
Pekín, un histórico aliado de Pyongyang que se ha visto forzado a apoyar las últimas sanciones contra Corea del Norte en la ONU, invitó hoy a las partes a «mostrar valentía política y decisión» en un «viaje que no será fácil», afirmó su ministro de Asuntos Exteriores, Wang Yi.
Japón, por su lado, mantiene el escepticismo que ha mostrado desde que empezaron los acercamientos entre las dos Coreas. Su primer ministro, Shinzo Abe, se mostró hoy partidario de mantener la presión sobre Corea del Norte y de no ofrecerle ningún tipo de incentivo para negociar, al tiempo que anunció que viajará en abril a EEUU para reunirse con Trump y analizar los potenciales contactos con Pyongyang.