Dos meses del estado de alarma: Más de 27.000 muertos, 230.000 contagiados, 950.000 parados, tres millones en ERTE…
Este jueves se cumplen dos meses desde que el Gobierno decretara el estado de alarma para frenar la epidemia del COVID-19 y el balance no puede ser más negativo.
La trágica y tremenda cifra de más de 27.000 fallecidos, con la tasa de mortalidad por habitante más alta del mundo, casi 230.000 contagiados ‘oficiales’, una merma considerable de las libertades que nos aproximan a un estado de excepción, y todo ello con un hundimiento histórico de la economía. Con un Gobierno que por la mañana dice una cosa, por la tarde otra, y al día siguiente sorprende con el BOE con las más variopintas propuestas, que nada tiene que ver con lo dicho.
Dos meses de estado de alarma y el Gobierno de Pedro Sánchez ha logrado que se asuma ahora a diario como buen dato la cifra inferior a los 200 muertos. 60 días donde han fallecido más personas que en los trágicos atentados del 11-M de 2004 en Madrid, que, por cierto, abrieron la puerta de La Moncloa a otro socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, que cuando fue echado por los españoles en las elecciones generales de 2011 dejó inmersa a España en la peor crisis económica de la democracia. Hasta entonces, porque ahora la superará Pedro Sánchez.
El estado de alarma ha condenado a muchos ciudadanos a la pobreza, con colas en centros de ayuda para recoger una bolsa de comida con los productos más básicos, algo que es habitual en países como Venezuela, pero no en otros, como España, que forma parte de la OCDE. En estos dos meses se han conocido datos que avanzan la recesión económica, con una caída del PIB en el primer trimestre del 5,2 %, y una destrucción de casi 950.000 empleos del 12 de marzo al 30 de abril, así como tres millones de trabajadores en ERTE, cierre de negocios y, todo ello, sin olvidar las restricciones a los movimientos y libertades de los ciudadanos, que hasta se le prohíbe circular con una bandera de España.
El mantenimiento del tejido productivo y del trabajo han sido los principales objetivos de las medidas aprobadas por el Ejecutivo en estos dos meses, junto con la ampliación de la cobertura frente al desempleo y una mayor protección a los consumidores.
Tras estos meses de nefasta gestión, el Gobierno de Pedro Sánchez aspira ahora a conseguir una quinta prórroga, y no por 15 días, como hasta ahora, sino por un mes. Durante ese periodo, ha decretado la cuarentena de 14 días para los turistas internacionales, una medida que hundirá aún más si cabe al sector, clave en la recuperación económica de España.