La cúpula de la Generalitat hace aguas ante la DUI

La cúpula de la Generalitat hace aguas ante la DUI

25 octubre, 2017
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Actualizado: 25 octubre, 2017 13:22
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El Gobierno de la Generalitat está profundamente dividido ante la Declaración Unilateral de Independencia. Tres consejeros ya han asegurado que dejarán el cargo en caso de seguir la hoja de ruta separatista, mientras que ERC mete presión a Puigdemont para proclamarla.

El Ejecutivo autonómico de Carles Puigdemont hace aguas en las horas previas a su comparencia en el Senado, que tendrá lugar este jueves por la tarde. Encima de la mesa tienen dos caminos: una declaración unilateral de independencia o bien la convocatoria de elecciones autonómicas, aunque sean en clave plebiscitaria, tal y como hizo Artur Mas en 2012.

Los independentistas más radicales, como Jordi Turull o Marta Rovira, exigen al Ejecutivo de Puigdemont que tire hacia adelante con la hoja de ruta separatista, incluso con el 155 encima de la mesa. Es decir, abogan por una administración paralela en Cataluña cuya sede estaría en la llamada «Cataluña norte», en Perpiñán.

Todos los consejeros de Puigdemont ya han mostrado qué camino se debería seguir a partir de ahora. ERC y algunos como el consejero de Presidencia, Jordi Turull, y Educación, Clara Ponsatí, ya se han mostrado a favor de la declaración unilateral. A la misma se habrían opuesto Santi Vila, consejero de Empresa; Mertixell Borrás, consejera de Gobernación, y Carles Mundó, consejero de Justicia, quienes han amenazado con dimitir si se mantiene el pulso al Gobierno de España.

Puigdemont no ha dado ninguna pista sobre qué hará, pero este jueves el Parlamento catalán decidirá si aprueba la declaración unilateral en una votación que quedaría anulada inmediatamente por el Tribunal Constitucional. Asimismo, el mismo jueves, Puigdemont acudirá al Senado por la tarde, justo después de que el Parlamento ya se haya pronunciado, por lo que el escenario de unas elecciones podría ser el más probable.

Oriol Junqueras, vicepresidente y principal responsable de la fuga de empresas en Cataluña, ha afirmado que la convocatoria de elecciones sería un escenario de debilidad para los independentistas, más cuando han asegurado por activa y por pasiva que no se retrocederá ni un paso. Marta Rovira, secretaria general de la formación de izquierdas lo dejó claro a través de las redes sociales, pero hay voces en contra, como la de Santi Vila.

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