El Gobierno tras decretar la cuarentena a turistas: ‘Los estamos esperando’

El Gobierno, tras ordenar la cuarentena a turistas, considera que el hecho de contar «con uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo es un reclamo» para atraer a turistas, según la ministra portavoz, María Jesús Montero.

Lo que no ha contado la ministra portavoz es que España tiene la tasa de mortalidad por coronavirus más alta del mundo, con el mayor número de contagiados entre el sector sanitario, y tampoco con el hecho de que ha ordenado la cuarentena para los viajeros internacionales que lleguen, algo que el WTTC califica de pobre imagen, mientras la patronal turística muestra su estupor y sorpresa por esa medida, que es un nuevo golpe al turismo, y que desanimará a los pocos turistas que este año tenían previsto visitar nuestro país.

«Los estamos esperando» -será para meterlos en cuarentena-, ha añadido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros la también titular de Hacienda, que ha asegurado que los turistas saben que España cuenta con uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo y eso «es una garantía». Pero, por si acaso, los pondrá en cuarentena 14 días cuando lleguen a España. Es decir, que sus vacaciones las pasarán encerrados en la habitación de un hotel o de un apartamento turístico, sin posibilidad ni de bajar a la piscina, ir a la playa un tomarse una cerveza en la terraza de un bar ¿Quién va a querer venir así? ¿Quién se fía de España si otros países vecinos no han tomado esa medida de cuarentena a los turistas?

El sistema sanitario seguirá siendo un «reclamo importante», sobre todo para quienes tengan que hacer uso del mismo, ha considerado Montero. Un sistema sanitario que se ha visto desbordado por la falta de material y camas en los hospitales, que sufre la mayor tasa de contagiados en el mundo entre sus profesionales y que, por todo ello, registra la mayor tasa de mortalidad por habitante del mundo.

La ministra también ha señalado que se está trabajando «con prudencia y cautela» para garantizar que se pueda circular por las playas, por las calles y por los monumentos culturales del país «con total seguridad».