1.000 millones de euros: el objetivo de ACS para 2016
El presidente de ACS, Florentino Pérez, confía en que el grupo cumpla los objetivos marcados y logre en 2016 un beneficio de 1.000 millones de euros gracias a distintas medidas, como la culminación del proceso de transformación de Hochtief, menores gastos financieros o la reducción de los minoritarios.
Cuando la compañía materialice estos objetivos, afrontará la llegada de Marcelino Fernández Verdes (actual presidente de Hochtief y de la australiana Cimic) como consejero delegado del grupo ACS. «Cuando acabemos ese tema nuestro CEO vendrá aquí a dirigir un grupo consolidado con todos los problemas resueltos», ha añadido en la conferencia con analistas para presentar los resultados de 2016.
Asimismo, ha asegurado que la compañía sigue trabajando en el proceso de reorganización para alcanzar este objetivo que se marcó hace 2 años, y que ha redundado en una mejora en los resultados.
«Con esta estrategia llegaremos a los 1.000 millones este año y si no el que viene«, ha agregado Florentino Pérez, que asegura que la compañía está trabajando de una manera responsable y con la vista puesta en un año 2016 que «es muy importante» para ACS.
En este sentido, ha insistido en terminar de consolidar la transformación de su filial alemana Hochtief y en la australiana Cimic, un proceso que ha reconocido que no es fácil pero que «en menos tiempo es muy difícil hacer más».
Entre los hitos emprendidos destacan los cambios del equipo directivo, la optimización de la estructura financiera, la mejora de la calidad del balance, la racionalización organizativa, la venta de activos no estratégicos, la implantación de sistemas mejora de la calidad del balance de gestión de riesgos o la reducción deuda. Con ello, el ebit de Hochtief se ha incrementado un 25 % en los últimos 3 periodos.
Con respecto al dividendo, ACS ha asegurado que lo mantendrá seguro y que la decisión se adoptará en marzo.
Sobre el sector de la construcción en España, tras «descensos terribles», Pérez espera que se pueda mantener una actividad «modesta» ya que, al igual que en Europa, el desarrollo de infraestructuras ha sido espectacular. ACS señala que hoy en día su mercado no es España sino Canadá, EEUU y Australia.
En la zona de Asia-Pacifico, ACS espera nuevos proyectos de construcción en Australia por el déficit existente, el crecimiento de la población y la liquidez.
En Europa, la actividad sigue estancada y casi no se espera crecimiento por las restricciones presupuestarias. En Norteamérica también se esperan nuevos proyectos de colaboración público-privada.
En el sector industrial, y tras la venta de las renovables, ACS confía en que la cartera evolucione favorablemente ya que su negocio no está ligado a la caída del precio del petróleo.