200 despedidos en el Grupo Pascual
El grupo Pascual ha iniciado un procedimiento de despido colectivo que afectará a cerca de 200 empleados debido a una «reorganización» de su estructura motivada por causas técnicas y organizativas, pero no económicas.
Así lo han avanzado este lunes a Efe fuentes de la compañía, que han precisado que los despidos se concentrarán sobre todo en la distribuidora Qualianza, y en menor medida también en el área industrial y en sus servicios centrales.
El procedimiento abierto ahora tiene por objetivo llevar a cabo «una inaplazable reorganización de los recursos humanos» ante «la rápida evolución del mercado y su inminente transformación, acelerada en los últimos tiempos», de acuerdo con estas mismas fuentes.
Los responsables de Pascual -que cuenta con cerca de 2.200 empleados en plantilla- han detallado que ya se ha comunicado la medida a los sindicatos y que está previsto iniciar en breve las conversaciones para llegar a un acuerdo.
La decisión adoptada responde «a un análisis pormenorizado de los perfiles, procesos y puestos que la compañía necesita para hacer frente desde ya a este nuevo mercado y a los nuevos modelos de relación y eficiencia industrial», con el foco puesto en la omnicanalidad, la transformación digital y la automatización de procesos, entre otros.
El grupo pretende abordar el ajuste de plantilla «con especial sensibilidad para que alcance al menor número de personas posible», de acuerdo con los directivos de la firma, que han insistido en la necesidad de adaptar «los sistemas de producción, gestión y distribución a la realidad del mercado».
La compañía láctea, con sede en Aranda de Duero (Burgos), cuenta con seis plantas y comercializa más de 200 referencias en 67 países entre leches, aguas minerales (Bezoya), bebidas vegetales (Vivesoy), zumos (Bifrutas) y café (Mocay).
El grupo Pascual cerró 2019 con una facturación de 698 millones de euros (+0,4 %) y un beneficio bruto de 16,9 millones (-37 %).