6 trampas comunes de las empresas de telefonía
El negocio de la telefonía móvil tiene en España cerca de 54 millones clientes, según últimos datos de la OTSI (Observatorio Nacional de Telecomunicaciones y de la SI). Este considerable volumen hace que las compañías utilicen todas las herramientas posibles para ampliar su cartera de clientes. El mercado de la telefonía móvil es uno de los más competitivos que existen y por ello las empresas utilizan todas sus armas para conseguir y retener clientes.
Uno de los problemas más comunes que nos encontramos a la hora de querer cambiar de operador, habitualmente por encontrar otro que nos ofrezca mejores condiciones, es el de la “permanencia”, que nos impide pasar a otra compañía en un tiempo determinado o a pagar una sanción si decidimos hacerlo. por ello, Wiquot resume las arducias de estas compañías para retener clientes:
Ofrecen mejores ofertas cuando el cliente se da de baja
En estos casos hay que ser cautos porque en la letra pequeña de las nuevas condiciones suelen aparecer tarifas extra o ampliación de la permanencia.
Tarifas promocionales con trampa
Algunos usuarios han caído en la trampa de una nueva tarificación, más económica o con más ventajas por horas, que las compañías han utilizado para no cancelar sus permanencias endureciendo sus sanciones en caso de baja, acción que no es legal.
La triple permanencia
Aunque en los últimos años la normativa se ha endurecido, hay que tener mucho cuidado con lo que firmamos. Una de las trampas más utilizadas por las compañías telefónicas ha sido la triple permanencia: permanencia de operador (el cliente puede cambiar de tarifa pero no abandonar la compañía), permanencia de tarifa (obliga al cliente a tener la misma tarifa durante el plazo indicado en el contrato) y permanencia del terminal (el cliente no puede marcharse hasta que pague la última cuota de su teléfono).
Llamadas en espera
Cuando un cliente quiere darse de baja, comienza un lento proceso en el que van pasando su llamada de teleoperador en teleoperador, que muchas veces consigue que este desista o alargue su tiempo con la compañía.
Complicación para darse de baja
Cuando llamamos a una compañía para darnos de baja y nos contesta la operadora automática, nunca aparece entre las opciones la posibilidad de darse de baja. Para agilizar los trámites, es aconsejable escoger cualquier otro asunto y exponer nuestro fin cuando hablemos directamente con un operador.
Altas penalizaciones
Una de las bazas que utilizan las compañías para que el cliente no se marche es el amenazar con altas penalizaciones si no se cumple el tiempo de permanencia. Es importante tener en cuenta que según la última ley de 2014, la operadora no podrá exigirle al usuario el 100% de la penalización, que suele rondar entre los 200 y los 350€.