Acerinox exige llevar a los Presupuestos las primas y subvenciones de la luz

Acerinox, a través de la patronal de la siderúrgica, Unesid, ha defendido la necesidad de rebajar la factura de la luz en un momento en el que el precio está disparado, alcanzando máximos de hace 13 años en un mes de junio.

Unesid ha exigido una factura de la luz más «barata y competitiva», motivo por el que defiende sacar de la factura subvenciones a la insularidad, el carbón o primas de renovables, aunque el 38% de éstas está incluida dentro de las cuentas públicas. De esta forma, serían todos los contribuyentes quienes sufraguen estas partidas, aunque el montante no se vería reflejado en las cuotas mensuales cobradas por las eléctricas.

El presidente de Unesid y consejero delegado de Acerinox, Bernardo Velázquez, y el director general de la patronal, Andrés Barceló, han mostrado su preocupación por los altos precios de la electricidad en España, un coste que merma la competitividad empresarial. En este caso, ha asegurado que producir acero en España es un 30% más caro que en Francia y un 50% más elevado que en Alemania.

Velázquez se ha referido también a la subasta de interrumpibilidad, aquella en que las industrias de gran consumo eléctrico se adjudican pagos por estar disponibles para cortar su suministro en caso de que sea necesario para el sistema eléctrico, y ha dicho que la de este año «no ha contentado a nadie» y que el sistema que hay «va a peor». El montante de estas subastas supone un rejón para los consumidores y familias de 370 millones de euros solo el año pasado. Desde que se puso en marcha este ruinoso mecanismo, los consumidores han pagado cerca de 4.500 millones de euros.

Además, ha señalado que el pacto por la industria en España no acaba de llegar y ha añadido que sería bueno sacar de la factura eléctrica determinados costes, como subvenciones y primas a las renovables. Según Velázquez, el precio en el mercado mayorista, conocido como el ‘pool’ y que se fija en Holanda y Reino Unido, «ya viene contaminado», mientras ha afirmado que consumidores, familias e industrias no deben pagar determinados costes, sino que debería ser el conjunto del Estado quien haga frente a estos gastos en los Presupuestos Generales. De esta forma, el coste de la factura eléctrica se reduciría, aunque se está abonando por la vía de los Presupuestos.

A modo de ejemplo, producir una tonelada cuesta a Acerinox cerca de 20 millones de euros, si se multiplica por la producción del año pasado en España, de 14 millones de toneladas, estaría en 280 millones de euros solo el pasado año.

Barceló, por su parte, ha dicho que el problema no es sólo el diferencial de precios con otros países, sino su volatilidad teniendo en cuenta que en la siderurgia tanto las inversiones como los pedidos son a largo plazo, por lo que hace falta un marco estable para tomar decisiones.

«La Administración tiene que pensar en favorecer a la industria», pide Acerinox a Sánchez

Andrés Barceló ha señalado que a la industria lo que le interesa es producir y vender lo suyo, no la electricidad, si bien está dispuesta a colaborar para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico. Velázquez ha indicado que sin un pacto por la industria y un precio competitivo de la electricidad no se conseguirá el objetivo de que la industria alcance un 20% del PIB y que España vuelva a contar con un importante tejido industrial.

«La Administración tiene que pensar en favorecer a la industria«, ha añadido el presidente de Unesid, que ha dicho que «hay que reconocer la importancia que la industria electrointensiva tiene para la economía y para el empleo» en España, donde por cada empleo en la siderurgia se crea 1,8 en industrias auxiliares.

Ha añadido que la industria siderúrgica española, que ha tenido que compensar con eficiencia sus desventajas, como la de estar lejos de los centros de consumo en Europa central, se convertiría en una «potencia siderúrgica», si contara con las «mismas armas» que sus competidores.