El Ayuntamiento de Pontevedra, gobernado en coalición por el BNG y el PSOE, no da por perdida la batalla judicial para cerrar Ence y acabar con la empresa papelera y con miles de puestos de trabajo, directos e indirectos, en la ría y ha anunciado que presentará un «incidente de nulidad de actuaciones» para que la sentencia del Tribunal Supremo que avala la continuidad de la fabrica vuelva a la Audiencia Nacional.

El gobierno local pretende así, según ha explicado este lunes su portavoz, Anabel Gulías, dejar sin efecto una sentencia que consideran «injusta» y que permite a la empresa pastera mantener su actual ubicación en la ría de Pontevedra hasta el año 2073.

El recurso planteado por el consistorio pontevedrés contra la prórroga de 60 años concedida a Ence por el Gobierno en funciones de Mariano Rajoy, anulada posteriormente por la Audiencia Nacional, recuerda Gulías, exponía cinco argumentos para rechazar esta concesión.

La Audiencia Nacional solo tomó en consideración el primero de ellos, que aludía a la incompatibilidad de la permanencia de la fábrica con el artículo 32 de la actual Ley de Costas, que impide estas concesiones si estas actividades pueden desarrollarse en otras ubicaciones.

Al atender ese argumento, el tribunal «no entró en el resto», según la edil pontevedresa, así como tampoco lo hizo el Supremo, lo que a juicio del Ayuntamiento de Pontevedra genera «indefensión» de los intereses de la administración municipal.

«Nosotros no dábamos solo ese argumento, sino que había muchos más», ha subrayado la portavoz municipal, entre ellos la falta de concurrencia pública en esa prórroga.

Mediante la presentación de este incidente de nulidad de actuaciones, el Ayuntamiento busca que el caso vuelva a la Audiencia Nacional para que se juzguen todos los argumentos incluidos en su recurso para tener «garantías» de que sea un proceso «justo, igualitario y efectivo».

Anabel Gulías ha insistido en que este asunto es una cuestión «importantísima» para el Gobierno local de Pontevedra, que advierte que seguirán luchando «por tierra, mar y aire» para recuperar los terrenos que ocupa Ence en la ría de Pontevedra.