El Banco Santander cerró el primer semestre del año con un volumen de 1.023 millones de euros concedidos en financiación ICO, lo que representa una cuota del 50 %, entre préstamos y «leasing» o arrendamiento financiero con opción a compra.
El 70 % de estas operaciones, explica la entidad en una nota remitida este martes, se han realizado con el segmento de autónomos y microempresas y el 30 % restante, con el de empresas y pymes.
En este sentido, el banco ha formalizado más de 15.500 operaciones de un importe medio de 70.000 euros y con un plazo que, en su mayor parte, es de tres años en adelante.
Desde 2015, los clientes pymes y empresas vinculados han aumentado un 66 % y han alcanzado los 1,7 millones a cierre del primer semestre de este año, en gran parte por la transformación digital y comercial que el banco está llevando a cabo, explica la nota.