El ‘Plan de Desescalada Inteligente’ de la hostelería para reabrir sus puertas

El ‘Plan de Desescalada Inteligente’ de la hostelería para reabrir sus puertas

27 abril, 2020
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Actualizado: 27 abril, 2020 12:33
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Las patronales Hostelería de España, Aecoc y FIAB han pedido este lunes al Gobierno participar «activamente» en el relanzamiento de la hostelería y le han propuesto un plan para la reapertura segura de los negocios.

Con apoyo de la consultora EY y de expertos en sanidad, las organizaciones han diseñado un «Plan de Desescalada Inteligente», basado en las necesidades del sector, que ponen a disposición del Ejecutivo.

Hostelería de España, la Asociación de Empresas de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc) y la Federación de Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) han recogido «medidas que garanticen la seguridad sanitaria y minimicen el impacto económico para el sector».

Alrededor de 40.000 empresas podrían tener serias dificultades para sobrevivir tras la crisis, según un comunicado conjunto de las tres organizaciones, que solicitan presentar su plan urgentemente a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera; la de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; y la Oficina Económica del Gobierno.

El objetivo es «ayudar al Ejecutivo, desde el conocimiento y la realidad del sector, a poner en marcha un plan de desescalada para la hostelería en el que se tenga en cuenta cada territorio», así como un paquete de medidas para un sector que sufre una «crisis sin precedentes».

La iniciativa incluye una «Guía de reapertura segura», con medidas preventivas adaptadas a cada tipo de establecimiento para maximizar la seguridad de empleados, proveedores y consumidores.

También presenta distintos escenarios en función de las vacunas, test inmunológicos, certificados digitales y otros instrumentos que puedan ser aprobados por el Gobierno.

El sector de la hostelería en España cuenta con más de 300.000 establecimientos y genera más de 1,7 millones de empleos, según la nota, que recoge estimaciones que apuntan a una posible pérdida de facturación de hasta el 40 % este año, 680.000 puestos de trabajo afectados y una caída de un 15 % en el volumen de establecimientos.

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