El presidente ejecutivo de Grifols, Thomas Glanzmann, asume también el cargo de CEO
El presidente ejecutivo de Grifols, Thomas Glanzmann, asumirá también el cargo de consejero delegado de la farmacéutica, una responsabilidad que hasta ahora compartían Víctor y Raimon Grifols, que ahora desempeñarán otros cargos menores en la cúpula directiva de la farmacéutica.
La compañía, que ha informado este lunes de este cambio en la estructura directiva en un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ha asegurado que se trata de una apuesta por «una organización funcional centrada en la ejecución» y con una gobernanza más simplificada.
Con la presidencia ejecutiva y el nuevo cargo de consejero delegado, Glanzmann refuerza su posición al frente de la firma catalana de hemoderivados, controlada por la familia Grifols, desplazando así de los puestos más altos de la cúpula a los miembros de la familia.
Glanzmann fue nombrado presidente ejecutivo en febrero de este año, tras la dimisión de Steven F. Mayer por motivos de salud, y asumió entonces la responsabilidad de liderar la compañía en la etapa de recuperación tras la pandemia, mientras que Raimon y Víctor Grifols compartían el rol de consejeros delegados.
Tres meses más tarde, el ejecutivo de origen suizo les releva a ambos en esta función. Los Grifols pasarán a desempeñar puestos en la cúpula directiva «de carácter más específico y funcional que dan respuesta a las necesidades reales que hoy por hoy tiene la compañía», según el comunicado de la compañía.
Víctor Grifols Deu, director de operaciones
En concreto, Víctor Grifols Deu, nuevo director de operaciones, centrará su gestión en el día a día de la empresa, al tiempo que seguirá como miembro del consejo de administración.
Por su parte, Raimon Grifols, que es el actual vicepresidente, además de sus funciones en el consejo de administración, asumirá el cargo de director general corporativo y se centrará en optimizar el valor de las filiales y asociaciones corporativas.
La compañía ha subrayado que los cambios buscan «acelerar la ejecución del plan estratégico de Grifols» y se enmarcan en la reestructuración que ya ha iniciado la firma con la creación de las unidades de negocio.
Grifols, que anunció en febrero un plan para aumentar su competitividad y reducir costes, «esta tomando todas las decisiones necesarias para ser una compañía más ágil, más eficiente y más flexible para navegar en un entorno cambiante», señala la firma.
El nuevo consejero delegado ha asegurado que «estos cambios nos posicionarán para nuestra próxima etapa de crecimiento y nos ayudarán a lograr los resultados y a acelerar nuestro rendimiento para cumplir con los compromisos con todos nuestros grupos de interés».