Francisco González dedica el 4,2% de los 110 millones pagados por el BBVA en la compra de acciones del banco
El expresidente de BBVA Francisco González ha adquirido un millón de acciones del banco tras abandonar su cargo de máximo ejecutivo en la entidad financiera, por las que habría pagado cerca de 4,63 millones de euros. Una cantidad impensable para la mayoría de los mortales, pero que sólo supone el 4,2% de los 110 millones recibidos por González al dejar la presidencia del banco vasco.
Francisco González, expresidente ejecutivo del BBVA, ha recibido una pensión del banco de 110 millones de euros una vez que ha abandonado la presidencia tras 20 años al frente de la entidad financiera. En su plan de pensiones acumula un total de 80 millones de euros, dotados en 2010, más 4,2 millones de acciones que ha recibido como parte de su retribución variable..
Además de incrementarse el sueldo en un 18% en 2018, -se desconoce lo que ganó en 2018-, pese a que el BBVA solo ganó un 1,3% más, González contaba con su jugoso plan de pensiones, cifrado en casi 79,7 millones de euros y más de 4,2 millones de acciones.
En 2010, el BBVA decidió aprobar la congelación de su plan de pensiones, justo cuando el actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, salía de la entidad con 50 millones de euros. González contaba entonces ya con 79,7 millones de euros, un montante al que hay que sumar las acciones abonadas por la entidad financiera a lo largo de los años y llega a acumular 4.234.413 títulos, de los cuales ha cobrado el correspondiente dividendo.
Según han informado hoy a Efe fuentes del banco, el expresidente adquirió los títulos de BBVA los días 28 y 31 de diciembre, que sumados a los que ya tenía hacen un total de 5,46 millones de acciones del banco.
Esa participación, teniendo en cuenta la cotización actual de BBVA, está valorada en unos 25,8 millones de euros.
La compra de acciones de Francisco González tras su salida de BBVA se interpreta, según el banco, como una muestra de confianza del exbanquero en el futuro de la entidad, ahora presidida por Carlos Torres Vila, el que fuera su mano derecha y consejero delegado hasta finales de 2018, aunque en realidad sólo representa el 4,2% de los 110 millones pagados por erl banco por su salida, a los que habría que sumar el sueldo de todo el año 2018.