González recuerda que Zapatero y Sebastián intentaron controlar el BBVA de la mano de Sacyr

Hace ahora 14 años Sacyr, con el apoyo del Gobierno de Zapatero y de Miguel Sebastián, intentó hacerse con el control del BBVA. Hoy Francisco González, su presidente, lo ha vuelto a recordar en la presentación de resultados de 2017.

Francisco González era de los presidentes del Ibex 35 que el Gobierno socialista esta dispuesto a derribar cuando ganó las elecciones en marzo de 2004. Su fuerte relación con José María Aznar, que le llevó a la presidencia de Argentaria en 1996 relevando a Francisco Luzón, le hacía un banquero incómodo a los ojos del PSOE.

La operación fue diseñada por Miguel Sebastián, director del Servicio de Estudios del BBV antes de su fusión con Argentaria y al que Francisco Gónzález defenestró una vez que asumió la presidencia del BBVA en el año 2000, en noviembre de 2004.

Debido a su ideología socialista, Sebastián pronto encontró acomodo en el Gobierno de Zapatero. Fue nombrado, antes de ser uno de los peores ministro de industria de España, con decsiones como el alamcen de gas Castor o las bombillas de bajo consumo, dirigió la Oficina Económica de Moncloa. Y desde ese puesto urdió la operación de asalto al BBVA.

Para ello se contó con el apoyo de la constructora Sacyr, controlada y presidida por Luis de Rivero, un empresario con pasado falangista pero que aspiró a ser el constructor del Gobierno Zapatero. Esta aventura del BBVA, más otro fracaso también en Repsol, así como la crisis del ladrillo, acabaron con él.

Francisco González se hizo fuerte en el BBVA y resistió el envite. Desde entonces ha mantenido la presidencia sin demasiados sobresaltos político, o accionariales -ni siquiera ha sido cuestionado por las familias de Neguri, los accionistas vascos del banco- pese a convivir otros seis años más con el PSOE hasta que en 2011, los suyos, el PP volveron al poder, aunque ya sin su principal valedor, Rodrigo Rato.

14 años después González recuerda el ataque de Zapatero, Sebastián y Rivero

Hoy, no se sabe muy bien por qué, se ha encargado Francisco González de recordar ese episodio vivido hace ya 14 años. Dice González que durante su mandato el banco ha dejado claro que «no se deja achantar por el poder político».

El banquero, que llegó a Argentaria a propuesta del Gobierno de José María Aznar y desde allí, tras la fusión con el BBV, llegó a la presidencia del BBVA, ha insistido en que el grupo ha acreditado que es «un banco serio y sólido».

Y ha recordado que la entidad ha tenido «momentos duros», por ejemplo, cuando una compañía constructora «muy pequeña», -en alusión a Sacyr- pero «apoyada por el Gobierno de turno» -el de José Luis Rodríguez Zapatero y su acólito Sebastián- quiso hacerse con el banco.

Si eso no se hubiese evitado, el grupo hoy sería muy distinto, ha opinado, de ahí su idea de que la entidad no se deja achantar, «o mejor dicho doblegar» ante el poder político.