GSMA hace caso omiso al Gobierno y a la Generalitat y cancela el MWC de Barcelona con un impacto de 500 millones y 13.000 empleos
El Congreso Mundial de Móviles (MWC) de Barcelona se ha cancelado este miércoles por decisión que la organización, la GMSA, pese a las rogativas del Gobierno de Pedro Sánchez y de la Generalitat de Quin Torra para su su celebración. Las principales multinacionales del sector no han visto garantizadas las condiciones sanitarias del MWC 2020 y su decisión de nio asistir ha acabado con el evento.
Pese a que esta misma tarde del miércoles, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y la consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, han afirmado que no había ningún problema de salud para celebrar el MWC 2020, la organización, GSMA, ante las numerosas cancelaciones de grandes empresas del sector, que no se fían de los dicho por el gobierno español y catalán, ha decidido cancelar el evento.
El congreso, se iba a celebrar del 24 de febrero al 27 de febrero, y se esperaba la asistencia de más de 100.000 personas, y un impacto económico de cerca de 500 millones de euros en Barcelona, además de generar más de 13.000 empleos.
La cancelación supone un fuerte varapalo para los hoteleros de la ciudad en temporada baja, ya que la semana del Mobile es la que más ingresos aporta en todo el año, por encima de los meses de verano; también para los restaurantes, así como para taxistas y empresas VTC, entre otros sectores, como el del lujo.
A medida que se iba conociendo la cancelación de empresas que pensaban asistir, la organización iba confirmando que se mantenía el congreso, al tiempo que incrementaba las medidas de prevención para el coronavirus.
Hoy por la mañana, tras más de una veintena de bajas, la organización se reunía con carácter de urgencia para decidir qué hacer. En un primer momento, anunció que mantendría la celebración, aunque finalmente lo ha cancelado.
Y mientras esto ocurría en España, en Holanda se celebraba con normalidad el Integrated Systema Europe (ISE), un evento tecnológico, en el que participan por ejemplo empresas como Sony, Cisco o Intel, precisamente tres de las que anunciaron que estarían en el MWC.
Algunas de las compañías consultadas por EFE estaban pendientes de si los organizadores decidían posponer el congreso, en lugar de cancelarlo, ya que se había pagado el espacio reservado en la feria (entre 1.000 y 1.430 euros el metro cuadrado.
A esto se suma, el gasto en adquisición de mobiliario y montaje de expositores, además de la reserva de algunas salas para conferencias.
En las condiciones de la página de GSMA que se aceptan a la hora de registrarse para el evento, se incluye un apartado que explica que la organización quedaría exonerada de sus responsabilidades, en el caso de que no pueda cumplir sus obligaciones por fuerza mayor, lo que incluye la propagación de virus.
La primera baja al congreso fue la de la surcoreana LG, a la que siguió la europea Ericsson, una de las empresas que tiene el expositor más grande de la feria, seguida de más de una veintena de firmas tecnológicas, entre ellas Vodafone, una de las últimas en anunciar su cancelación.
Otra operadora de peso que anunciaba hoy su no asistencia era Deutsche Telekom, que se unía a Facebook, Nokia, Rakuten, AT&T NTT Docomo, Amazon, Umidigi o MediaTek.
Tras la cancelación del MWC, Telefónica ha expresado en un comunicado, su apoyo a Barcelona como anfitriona del evento, tras asegurar que entendía la decisión de suspender el congreso y de mostrar su reconocimiento al enorme esfuerzo realizado tanto por la organización del como por las autoridades.
La única realidad es que ni el Gobierno español ni el autonómico de Cataluña han sido capaces de garantizar un MWC 2020 sin problemas de salud para sus asistentes.