Iberdrola sube un 24% el dividendo flexible de julio, hasta un mínimo de 0,183 euros
Iberdrola ha propuesto subir este viernes el dividendo flexible de julio hasta un mínimo de 0,183 euros por acción, un 24% más respecto al pagado en 2017, según el hecho relevante remitido este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Este importe, junto a los 0,14 euros brutos por acción pagados el pasado 29 de enero a cuenta del resultado de 2017, hacen que el dividendo alcance como mínimo los 0,323 euros
brutos por acción, es decir, un 4,2% respecto de la remuneración mínima prevista para el ejercicio 2017 de 0,310 euros brutos por acción. No obstante, el importe de la remuneración total finalmente abonada al accionista en el ejercicio 2017 fue de 0,312 euros brutos acción, por lo que la subida es del 3,5%, como mínimo.
Según ha presentado esta misma semana Iberdrola en su plan estratégico, el dividendo será de 0,4 euros brutos por título en 2022, abonando a sus accionistas un total de 12.000 millones entre este 2018 y los próximos tres años. De esta forma, el dividendo de Iberdrola se incrementará un 25% respecto para dentro de cuatro años respecto al pago del pasado 2017.
Destinará a dividendo entre 2018 y 2022 casi el mismo importe que ebitda estimado para 2022
Según ha comunicado esta misma semana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores tras presentar sus resultados correspondientes a 2017, el Ebitda en 2022 se situará entre 11.500 y 12.000 millones en 2022 y un beneficio de entre 3.500 y 3.700 millones.
Para 2022 espera un Ebitda de entre 11.500 y 12.000 millones en 2022. Más del 80% generado por actividades reguladas o con contratos a largo plazo. Asimismo, espera un beneficio neto de entre 3.500 y 3.700 millones en 2022 bajo las estimaciones actuales de tipos de cambio.
32.000 millones de inversión en cuatro años
El plan eleva las inversiones en 4.000 millones respecto a la anterior estrategia de la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán entre 2016 y 2020. Iberdrola, sin contar Neoenergía, aumentará la inversión hasta los 27.000 millones, frente a los 25.000 millones del anterior plan, mientras que la inversión de Neoenergía será de 2.000 millones más, hasta un total de 5.000 millones.
Más del 90% de estos 32.000 millones irán destinados a actividades reguladas o contratos a largo plazo. De esta forma, destina 2.800 millones a generación comercial (9% del total); 11.500 millones a renovables (37%); 15.500 a redes (50%); y 1.400 a generación contratada (4%). Por divisas, destinará el 19% en libras esterlinas, el 25% en euros; el 18% en Real Brasileño y el 38% en dólares.