La GSMA ya se plantea cancelar el Mobile World Congress de Barcelona
El consejo general de GSMA, la asociación que organiza el Mobile World Congress (MWC), se reunirá el próximo viernes para evaluar la situación creada por las cancelaciones de firmas tecnológicas ante la crisis del coronavirus y determinar si sigue adelante con el evento.
Se trata de una reunión ordinaria del consejo general de GSMA prevista desde hace tiempo, si bien el goteo de bajas por parte de importantes compañías tecnológicas hace que tenga una especial relevancia, porque se espera que tome una decisión determinante al respecto, según fuentes conocedoras de las conversaciones.
Hasta ahora, la GSMA, la patronal mundial de los operadores móviles, se ha mantenido firme en la celebración del evento, previsto del 24 al 27 de febrero, a pesar de que ya son una decena las compañías que han renunciado a asistir por miedo a la propagación del coronavirus chino.
La última de ellas ha sido Intel, el gigante estadounidense de los procesadores, que se ha sumado así a compañías de peso como Ericsson, LG, Sony, Nvidia o NTT Docomo, entre otras.
A medida que aumentaba la incertidumbre sobre el coronavirus, la GSMA ha ido añadiendo medidas preventivas y restricciones, la última de las cuales ha sido prohibir la entrada a congresistas de la provincia china de Hubei, donde se produjo el brote, y vetar el acceso a quienes hayan estado en China 14 días antes de la celebración del evento, pero tampoco ello ha frenado el reguero de bajas.
La ausencia de estas empresas dejará libre un espacio en torno al 10 % en el recinto ferial de la Gran Via de L’Hospitalet de Llobregat, con un especial impacto en el pabellón 3, que suele ser el más visitado.
Pese a todas estas bajas y a la incertidumbre que existe sobre si el evento acabará celebrándose, los trabajadores continúan con el montaje de los estands y con los preparativos de la feria, el evento tecnológico más importante del mundo y uno de los congresos que mueve más dinero.
A la espera de que se produzca la reunión del viernes, la GSMA está en contacto permanente con Fira de Barcelona y con las administraciones públicas implicadas para garantizar que el MWC cuente con todas las medidas de prevención sanitaria necesarias para acoger un evento tan multitudinario como este pese a la alarma mundial generada por esta epidemia.
Aunque inicialmente la GSMA estimó en 492 millones de euros el impacto económico de esta edición del Mobile y calculó que superaría los 110.000 asistentes, ya se da por hecho que será imposible alcanzar esas cifras.
En 2019, el Mobile batió un nuevo récord de asistentes con unos 109.000 visitantes, procedentes de 198 países, de los que 7.900 eran directores ejecutivos.
De ese grueso de participantes, GSMA calcula que los que proceden de China son entre 5.000 y 6.000, de los que aún se desconoce cuántos optarán por no volar a Barcelona ya que firmas como Huawei y ZTE han confirmado que vendrán, pero que incrementarán la presencia de su personal de Europa en detrimento del residente en el país asiático.