La hija del presidente de Reyal Urbis deja la inmobiliaria en pleno concurso de acreedores

Raquel Santamaría Moliner, hija del presidente de Reyal Urbis y primer accionista, Rafael Santamaría, ha renunciado del consejo de administración de la inmobiliaria -en concurso de acreedores- por motivos personales.
Santamaría Moliner tenía la consideración de consejera ejecutiva, según ha señalado Reyal a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La inmobiliaria, en concurso de acreedores desde marzo de 2013, perdió 114,3 millones de euros en los nueve primeros meses del año 2016, el 17 % menos que los números rojos registrados un año antes por menores ingresos, daciones en pago y un incremento de los gastos financieros.
El endeudamiento financiero se elevó un 2,3% hasta los 3.514 millones. Reyal Urbis sostiene que, de acuerdo con Knight Frank, su cartera de activos está valorada en 1.190 millones, mientras que el valor de mercado de los terrenos e inmuebles terminados ascendía a 920 millones a cierre de 2015.
El grupo dispone en «stock» de aproximadamente 221 unidades sobre rasante de inmuebles terminados en España y Lisboa y tiene en balance una cartera de activos para su explotación en renta con una superficie sobre rasante alquilable de más de 123.000 metros valorada en unos 200 millones.
El concurso de acreedores de Reyal Urbis está pendiente de que la Audiencia Provincial de Madrid falle a favor o en contra de la propuesta de convenio después de que el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid rechazase la propuesta presentada por la inmobiliaria al entender que las quitas de deuda propuestas a sus acreedores (de entre 83-93 %) no estaban justificadas.
En 2015, la compañía anunció un expediente de regulación de empleo (ERE) para despedir a los cerca de 65 trabajadores que la inmobiliaria tenía en España, toda su plantilla.