La medida de Sánchez para bajar el recibo de la luz no llegará ni al 3% que ya ha subido en septiembre
Facua-Consumidores en Acción, una asociación alineada a la izquierda califica de «medidas raquíticas» para resolver el problema del encarecimiento del recibo de la luz el anuncio del Gobierno de que suspenderá el impuesto del 7% a la generación eléctrica para aliviar la factura eléctrica de los consumidores, pero que no supondrá ni una rebaja del 3% en el recibo.
El precio de la electricidad se ha situado hoy en un máximo anual casi en los 76 euros megavatio/hora y acumla ya en la primera quincena de septiembre una subida del 3%. Ante esta situación el Gobierno ha anunciado hoy su medida estrella que no es otra que suspender el impuesto del 7 % a la generación eléctrica para dejarlo a un tipo «prácticamente cero», y complementará el bono social eléctrico con la creación de uno nuevo para calefacción, con la finalidad de paliar los efectos de la subida de la electricidad en los consumidores. Lo único que ocurre es que esa media redcucirá el recibo de la luz en poco más del 2,5%, es decir, un porcentaje inferior sólo a la subida de septiembre.
La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha anunciado hoy, en su comparecencia en comisión en el Congreso de los Diputados, estas dos medidas inmediatas que adoptará el Ejecutivo, dirigidas, junto a otras, a «aliviar la factura eléctrica a los consumidores en un momento excepcional» por los altos precios en el mercado eléctrico que están encareciendo la factura de la luz.
Ribera ha explicado que el impuesto a la generación, creado en la Ley de Medidas para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico de 2012, no se suprimirá, sino que se suspenderá para quedar «prácticamente a cero», lo que supondrá, según fuentes del Ministerio, que se quede en un tipo residual (entre el 0 y el 0,5 %), que determinará la Abogacía del Estado.
Ha indicado que se ha optado por suspender ese impuesto porque es la medida que «está en nuestra mano» y la que «impacta de forma más rápida sobre el consumidor final», así como para dar tiempo a que el Gobierno pueda ofertar una propuesta coherente y conjunta para todo el sistema fiscal.
Respecto a una posible reducción del impuesto sobre el valor añadido (IVA), que es ahora del 21 % en la factura de la luz, ha reconocido que no es lógico que un consumidor vulnerable pueda pagar un 21 % de IVA en su consumo de luz, pero modificar este impuesto es más complejo porque es un ingreso comunitario y requiere una tramitación distinta.
Ha señalado que en este momento, con un sistema de fijación de precios en el mercado mayorista pensado hace dos décadas, en el que conviven tecnologías antiguas, como el carbón, la nuclear y el gas, con nuevas, como las renovables, la volatilidad de precios va a ser durante tiempo una tónica.
No obstante, ha señalado que el consumidor no puede ser el único que abone los costes del cambio y, por eso, el Gobierno va a poner en marcha medidas, como la suspensión del citado impuesto y la mejora de la cobertura inmediata a los consumidores más vulnerables.
Ha indicado que las medidas se discutirán «en un Consejo de Ministros muy próximo», en el que se abordará la adopción de las que están «más maduras», así como un cronograma de plazos para las que requieren más tiempo.
Ribera ha explicado que el bono social eléctrico se complementará con la creación de uno nuevo para la calefacción, para que este próximo invierno no haya consumidores que no puedan calentar suficientemente sus hogares, como les ocurría en 2016 a 4,6 millones de personas, una gran parte de los cuales eran hogares monoparentales y personas mayores.
Asimismo, ha anunciado que antes de seis meses el Gobierno presentará una estrategia contra la pobreza energética, y ha expresado la intención del Ejecutivo de incrementar los límites actuales de renta para tener derecho a los descuentos del bono social, dentro del cual se contemplará expresamente a las familias monoparentales y se introducirán criterios de protección a la infancia.
Además de las medidas de choque que aprobará el Gobierno, Ribera ha dicho que son necesarias reformas estructurales, como la del mercado eléctrico, la fiscalidad sobre la energía para que las señales de mercado sean «coherentes» y regular ordenadamente el almacenamiento para conseguir precios de la electricidad estables.
Autoconsumo
Ha manifestado su intención de modificar la Ley del Sector Eléctrico de 2013, impulsada por el Gobierno del PP, especialmente en lo que se refiere al autoconsumo, para reconocer en ella el derecho a autoconsumir sin cargos, el de compartir el autoconsumo y simplificar los trámites administrativos para las pequeñas instalaciones.
Otra medida para abaratar los precios de la electricidad será el impulso a las renovables, con la aprobación de un plan de repotenciación de instalaciones antiguas, una frecuencia en las subastas de renovables más predecible e incentivando los contratos de venta de electricidad a largo plazo (PPA).
Fuertes críticas desde Facua
Facua-Consumidores en Acción ha calificado de «medidas raquíticas» para resolver el problema del encarecimiento del recibo de la luz el anuncio del Gobierno de que suspenderá el impuesto del 7% a la generación eléctrica para aliviar la factura eléctrica de los consumidores.
Para Rubén Sánchez, portavoz de la organización, este anuncio del Ejecutivo no va a abaratar el recibo y demuestra que el Gobierno «no tiene intención de enfrentarse al oligopolio eléctrico». «Nos da la sensación de que en este país mandan más las eléctricas que quien gobierna», ha añadido.
El portavoz ha recordado que en agosto se registró una subida del recibo de la luz del 3 %, la misma cifra que en lo que va de mes de septiembre, y que «eso ya es más de lo que se abarataría con la medida anunciada».
«Nos esperábamos algo más, no demasiado, pero sí algo más», ha asegurado.
«Nos esperábamos algo más, no demasiado, pero sí algo más», ha asegurado.