Los nuevos faros de Ford que iluminan peligros que antes no veía
La nueva tecnología de faros de coche hace que los conductores modernos vivan realmente en el siglo de las luces, debido al importante contraste que supone la conducción nocturna en la actualidad y los faros considerablemente menos efectivos que utilizaban sus abuelos para alumbrar el camino que tenían por delante.
Una serie de imágenes que muestran la visibilidad desde coches que van desde un Ford T de 1908 hasta un nuevo Ford Mustang sirven para comprobar hasta dónde ha llegado la tecnología de iluminación. El ciclista está tan solo a 12 metros por delante del vehículo que ilumina la escena.
Los conductores del Ford T, modelo del que se vendieron más de 15 millones de unidades entre 1908 y 1927, tenían que encender las lámparas de acetileno antes de salir a la carretera. Los conductores de hoy en día no sólo se benefician de brillantes faros xenón y LED, sino también de una tecnología que puede frenar automáticamente si detecta peatones. Otras imágenes muestran la iluminación que proporcionaban coches de los años 30, 60, 70 y 90.
“En cuestión de tecnología de iluminación, hemos salido de las edades oscuras”, asegura Michael Koherr, ingeniero de investigación de iluminación de Ford. “Es bastante increíble la diferencia fundamental que estos cambios suponen en materia de seguridad vial y comodidad del conductor”.
Los faros de xenón, equipados en el Mustang, tienen aproximadamente tres veces la potencia de las bombillas halógenas. Como los sofisticados faros delanteros LED disponibles en modelos como el Ford Edge, los faros de xenón producen un brillante haz de luz blanca que puede hacer que parezcan cinco veces más brillantes que la luz amarillenta de los faros halógenos.
La iluminación se adapta a la velocidad y el entorno
Por supuesto, los usuarios actuales pueden conducir más rápido que los de los Ford T. Pero también se benefician de mejoras significativas en materia de tecnología que permiten que la iluminación se adapte a la velocidad y el entorno. Los faros también son diseñados ahora para difuminarse al borde del patrón del haz, en vez de desaparecer de manera abrupta, permitiendo que los objetos ocultos en la oscuridad vayan apareciendo de manera gradual en vez de repentinamente.
“Hemos pasado desde lo que eran básicamente velas a faros LED y de xenón eficientes y efectivos. En el futuro, veremos más coches equipados con luces LED súper brillantes, que pueden ayudar a los conductores a mantenerse alerta. La visibilidad nocturna es ahora mucho mejor. Como la noche y el día”, afirma Koherr.
“Estamos desarrollando nueva tecnología de iluminación que ayuda a que los conductores se fijen más en peatones, ciclistas e incluso animales de gran tamaño que puedan cruzarse en la trayectoria del vehículo. Esta utilizaría una cámara infrarroja para localizar a gente y animales a una distancia de hasta 120 metros”.