‘Parece que PSOE y Podemos quieren un país de hoteles, bares, restaurantes y lugares de ocio cerrados’

El presidente de la Diputación de Málaga y de Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, ha advertido de que «la inacción de este Gobierno respecto al turismo está haciendo que los daños provocados por la pandemia vayan camino de ser irreparables», y ha apostillado: «parece que PSOE y Podemos quieren un país de hoteles, bares, restaurantes y lugares de ocio cerrados».

El responsable de Turismo Costa del Sol ha alertado de que el Gobierno central pretende «dar la puntilla» al sector turístico, responsabilidad de la ministra Reyes Maroto, con su «dejadez», ante lo que ha exigido un cambio de estrategia y que pida ayudas europeas para auxiliar a esta industria.

Salado ha hecho estas declaraciones tras conocer que a día de hoy el Ejecutivo central no ha solicitado ningún apoyo al turismo a la Comisión Europea, noticia de la que da cuenta este jueves el diario El Mundo.

«Es el momento de que por fin se atienda a la demanda hecha por el sector y por las instituciones que sí nos ocupamos y preocupamos por el turismo y se nos garantice que el 25 por ciento de los fondos del plan de recuperación de la Unión Europea se destinen al turismo», ha demandado.

Salado ha indicado que es «lo menos que puede hacer» el Gobierno para una industria de la que, solo en la provincia de Málaga, dependen más de 117.000 familias.

En este sentido, ha mostrado su sorpresa ante el hecho de que nadie del Ejecutivo haya solicitado ayudas a Europa, y se ha preguntado «por qué razón no se atiende a uno de los sectores más perjudicados por la crisis sanitaria y en el que más empleo se está destruyendo»

A su juicio, «que la UE saque los colores al Gobierno es la última prueba de que su abandono del turismo es premeditado e ideológico, además de una imperdonable irresponsabilidad».

El presidente de Turismo Costa del Sol también ha mostrado su incomprensión ante la actitud de un PSOE «silente y plegado a las intenciones radicales de su socio, Podemos», y ha criticado que «no replica cuando (Pablo) Iglesias dice que va a aprovechar esta coyuntura para echar abajo el turismo y la construcción».

Por todo ello, ha exigido al Gobierno una explicación urgente y ha anunciado que se reunirá con representantes del sector para abordar posibles acciones ante «un ataque sin precedentes» a esta industria.

Según Salado, se trata de un sector al que «se intenta demonizar por ignorancia o sectarismo, pero que es la clave para que Málaga haya sido todos estos años uno de los puntales económicos del país».