Repsol, enfocada en su objetivo de cero emisiones netas para 2050
Repsol ha celebrado hoy en Londres su jornada anual para inversores ESG (medioambiente, sociedad y gobierno corporativo, en sus siglas en inglés) en la que la compañía expuso los avances en su hoja de ruta para convertirse en cero emisiones netas en 2050.
Este evento, en su octava edición, tiene como objetivo sentar las bases de una cooperación transparente con los grupos de interés relevantes para la transición energética. En la actualidad, el 37,1% de la base accionarial institucional de Repsol son inversores ESG, lo que supone cuatriplicar el número de 2016 y situar a la empresa como uno de los líderes en el sector.
En su intervención, el Consejero Delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, abogó por un enfoque más holístico de la transición energética en Europa para superar los retos que presenta un entorno complejo y en constante cambio y garantizar así una respuesta equilibrada al trilema energético: energía sostenible, segura y asequible para ciudadanos y empresas.
«Debemos replantearnos la transición energética en Europa. Estamos rechazando invertir en determinadas fuentes de energía por razones ideológicas, no tecnológicas ni científicas. Como consecuencia, los consumidores acaban pagando más por la energía que necesitan, y las industrias con un alto consumo energético luchan por competir en los mercados globales, teniendo que cerrar o deslocalizarse a otras regiones», explicó. También pidió una transición que no se base en prohibiciones o vetos, sino en dejar que todas las soluciones tecnológicas compitan o se complementen entre sí y demuestren su valía sin prejuicios ideológicos y sin rechazos.
Transformación industrial y la descarbonización, prioritarias para Repsol en esta 8º jornada ESG
Durante la jornada, directivos de la empresa presentaron a los inversores detalles sobre los avances en la producción de combustibles renovables y productos circulares, así como en el desarrollo de otras oportunidades bajas en carbono.
Un hito clave en el camino hacia el objetivo de producir 1,3 millones de toneladas de combustibles renovables en 2025 y 2 millones de toneladas en 2030 es la puesta en marcha, a finales de este año, de la primera planta en la Península Ibérica dedicada exclusivamente a la producción de biocombustibles avanzados y combustible sostenible de aviación (SAF) en el complejo industrial de la compañía en Cartagena.
La planta producirá 250.000 toneladas anuales, lo que permitirá un ahorro de emisiones de 900.000 toneladas de CO2 al año, equivalente al ahorro producido por más de 400.000 vehículos eléctricos.
La compañía aprovecha sus competencias clave y el alcance global del negocio de exploración y producción
Repsol desarrolla otras oportunidades bajas en carbono, como la geotermia; la captura y almacenamiento de CO2; o el almacenamiento de hidrógeno renovable como herramientas de descarbonización capaces de generar valor en un mercado con un considerable potencial de crecimiento.
Por otro lado, en los últimos años Repsol ha construido una cartera de activos renovables de 60 GW, que garantizan su objetivo de alcanzar 6 GW de capacidad instalada en 2025 y 20 GW en 2030. En septiembre, la compañía española entró en el negocio eólico terrestre de Estados Unidos, tras la adquisición de la empresa de energías renovables ConnectGen, con una cartera de proyectos de 20 GW y capacidades de desarrollo. Repsol cuenta en total con 2 GW de producción de energía renovable en España y Chile y, además, desarrolla proyectos en Italia y Estados Unidos.
En 2019, Repsol fue la primera empresa de su sector en comprometerse a ser neutra en carbono en 2050, en línea con el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Su hoja de ruta contiene objetivos intermedios claramente definidos para reducir su intensidad de carbono un 28% en 2030 y un 55% en 2040 para alcanzar las emisiones netas cero a mediados de siglo