Ryanair se moviliza contra las huelgas de los controladores aéreos
La aerolínea de bajo coste Ryanair presentó este miércoles a la Comisión Europea 1,1 millones de firmas de ciudadanos para reclamar que garantice que el cielo de la Unión Europea se mantiene abierto durante las huelgas de controladores aéreos, de modo que los aviones pueden sobrevolar los países donde se llevan a cabo estas acciones, en particular Francia.
La petición, presentada por el consejero delegado de la empresa, Michael O’Leary, al gabinete de la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, llega después de que en los cinco primeros meses del año se hayan registrado 57 días de huelgas de las autoridades de control del tráfico aéreo, diez veces más que en 2022, según datos de la compañía.
Las huelgas, destaca la aerolínea, han obligado a cancelar miles de vuelos que debían sobrevolar la UE desde España, Alemania, Italia, Reino Unido e Irlanda, mientras que Francia cuenta con una ley de servicios mínimos que protege sobre todo los vuelos domésticos y de corta distancia, pero genera cancelaciones «desproporcionadas» de aquellos que deben sobrevolar su territorio.
Por ello, llama a Francia, así como al resto de Estados, a imitar las normas de servicios mínimos con que ya cuentan España, Italia o Grecia, que protegen el tráfico que sobrevuela su territorio en caso de huelga, y reclama a la Comisión Europea que actúe a nivel de toda la UE.
«Apoyamos el derecho de que los controladores vayan a la huelga (…), lo importante es mantener los sobrevuelos y el cielo europeo abierto. Si va a haber cancelaciones, que se cancelen los vuelos domésticos o de corta distancia en Francia porque tienen alternativas: autopistas, trenes…», dijo O’Leary en una rueda de prensa en Bruselas, destacando el gran impacto de las huelgas francesas por la situación geográfica del país.
Ryanair pide en concreto a la Comisión que proteja en toda la UE
Así, Ryanair pide en concreto a la Comisión que proteja en toda la UE el cien por cien de los sobrevuelos en caso de huelga, como ya hacen España, Italia y Grecia, y que si hay cancelaciones se apliquen sobre todo a vuelos internos o cortos con origen o destino en el país de la protesta.
Reclama asimismo que se exija avisar de la huelga con al menos 21 días de antelación, y a los trabajadores notificar tres días antes si van a participar para minimizar el impacto sobre los pasajeros permitiendo informarles con tiempo, así como obligar a un proceso de arbitraje para las disputas de los controladores antes de ir a la huelga.
«La Comisión Europea tiene la obligación de proteger la libertad de movimiento de los ciudadanos y el mercado único de aviación, tiene que actuar», dijo O’Leary, quien pidió a Bruselas que ejerza «presión» sobre Francia para que adopte normas como las de otros países.
Entre enero y mayo, las huelgas llevaron a la aerolínea a cancelar 1.200 vuelos en Europa, dejando en tierra a 216.000 pasajeros.