Sánchez vuelve abrir la puerta giratoria: Coloca a la exministra Corredor como presidenta de Red Eléctrica

Sánchez vuelve abrir la puerta giratoria: Coloca a la exministra Corredor como presidenta de Red Eléctrica

21 febrero, 2020
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Actualizado: 21 febrero, 2020 17:27
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Pedro Sánchez ha pasado, como en tantos otros cambios de opinión, de acabar con las puertas giratorios de los político en las empresas, a poner el automatismo. El último nombramiento, la exministra de Vivienda Beatriz Corredor, de la que se desconoce su experiencia en el sector eléctrico, será la nueva presidenta de Red Eléctrica en sustitución de Jordi Sevilla, que anunció su renuncia al cargo el pasado mes de enero por sus graves desavenencias con la vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que ponían en peligro el futuro de la compañía.

Según ha informado este viernes Red Eléctrica Corporación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la Comisión de Nombramientos y Retribuciones de la Corporación ha propuesto el nombramiento de Beatriz Corredor como consejera para cubrir la vacante de Sevilla. Se desconocen los conocimientos de Corredor en el sector eléctrico, más allá de su profesión como registradora de la propiedad o exministra de Zapatero, por cierto, degrada dos años después de su nombramiento a secretaria de Estado. Sin embargo, su mayor mérito es, sin duda, su afiliación al PSOE y amiga personal de Pedro Sánchez al que ayudó a recuperar la Secretaría General del partido en 2017.

Asimismo, la comisión ha informado favorablemente del nombramiento de Corredor como presidenta del consejo de administración y presidenta no ejecutiva de la compañía, una vez que sea nombrada consejera.

Corredor llega a Red Eléctrica después de la polémica salida de Sevilla, quien fuera nombrado para el cargo tras acceder Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno al salir adelante la moción de censura que presentó contra Mariano Rajoy. El Estado tiene, a través de la SEPI, el 20% del capital de la empresas y es él que toma las decisiones, más políticas que empresariales.

Sevilla, en su salida, entregó una carta a cada uno de los consejeros de Red Eléctrica en la reunión del consejo de administración en que presentó formalmente su dimisión.

En la misiva, explicaba su decisión de abandonar el cargo por «restricciones externas sobrevenidas y discrepancias en el ámbito regulatorio» que podrían afectar a la buena marcha de la compañía.

Con esa fórmula, Sevilla dejaba entrever sus desacuerdos con la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que en la nueva regulación de la retribución para la compañía que ejerce como operador y transportista del sistema eléctrico ha rebajado sus ingresos para el periodo 2020-2025 en un 7,3 %.

Ribera, cuando fue preguntada por la dimisión de quien también fuera ministro de Administraciones Públicas con José Luis Rodríguez Zapatero, indicó que si Sevilla no se sentía cómodo, era comprensible que se fuera y aclaró, en contra de la opinión generalizada de los expertos del sector, que el Ministerio para la Transición Ecológica no había tenido injerencias en su labor como presidente de Red Eléctrica.

La realidad apunta a todo lo contrario. Y de hecho, Red Eléctrica tiene recurridas ante la Audiencia Nacional las circulares de la CNMC elaboradas por el marido de la ministra Ribera, Mariano Bacigalupo.

La sustituta de Sevilla en el cargo, Beatriz Corredor, también fue ministra con Zapatero, con quien fue titular de Vivienda entre 2008 y 2010, cuando el sector inmobiliario entró en la crisis más grave de su historia. Es famosa por sus propuestas de soluciones habitacionales, que no era otra cosa que minipisos de 15 metros cuadrados o la recomendación a los jóvenes que se comprarán zapatillas deportivas para lanzarse a la calle a buscar vivienda. Fue nombrada ministra en el año 2008 y degradada a secretaria de Estado del Ministerio de Fomento en 2010, al ser incapaz de hacer frente como responsable de Vivienda del estallido de la burbuja inmobiliaria, que terminó llevando a España al borde del abismo y a la intervención de las cuentas por parte de la Comisión Europea.

Nacida en Madrid el 1 de julio de 1968, se licenció en Derecho en la Universidad Autónoma de Madrid en 1991 y en 1993 ingresó en el Cuerpo de Registradores de la Propiedad.

Una década después se afilió al PSOE y estuvo al frente de la Secretaría de Mujer e Igualdad de la Comisión Ejecutiva Local de los socialistas madrileños.

Tras su salida del Gobierno, en marzo de 2012, se reincorporó a su trabajo como registradora de la propiedad en Majadahonda (Madrid).

Beatriz Corredor se sumó en 2017 al proyecto de Pedro Sánchez para recuperar la Secretaría General del PSOE y en 2018 asumió la presidencia y la dirección de la Fundación Pablo Iglesias, puesto en el que sucedió a José Félix Tezanos, actual presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), al que tambien le abrió la puerta Sánchez para que le cocinara las encuestas a su gusto. En las últimas elecciones generales, el CIS protagonizó un ridículo de película, al pronosticar 140 diputados para el PSOE cuando sólo tuvo 120, dos menos que en los anteriores comicios.

La próxima presidenta de Red Eléctrica fue elegida diputada por Madrid en las elecciones del 28 de abril de 2019, donde figuró en la lista socialista en el puesto número 8, así como en las que se repitieron en noviembre de ese mismo año tras no poder Pedro Sánchez formar gobierno.

Sin embargo, el pasado 13 de enero, pocos días después de tomar posesión como diputada, renunció a su escaño alegando motivos personales, quizás porque ya sabía que sería la próxima presidenta de Red Eléctrica. Como presidenta del Red Eléctrica su sueldo superará los 500.000 euros anuales, frente a unos 100.000 euros de un diputado base.

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