‘Sobran millón y medio de funcionarios’

‘Sobran millón y medio de funcionarios’

08 diciembre, 2021
|
Actualizado: 08 diciembre, 2021 16:25
|
En esta noticia se habla de:
PUBLICIDAD

El profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) Ramón J. Moles destapa en un libro las carencias de la administraciones públicas en España, muy «frágiles» ante adversidades como la pandemia y con un «exceso» de funcionarios: «De los tres millones, sobran millón y medio».

En «Derecho administrativo en colores» (Editorial Aranzadi, 2021), Moles no solo analiza los problemas de las administraciones públicas en España, sino que propone maneras para abordarlos ante los desafíos del siglo XXI, que en su opinión exigirán una mayor «flexibilidad».

Sobre el «exceso» de funcionariado, el profesor de Derecho Administrativo argumenta que el estatus del funcionario sirve como figura protegida para los trabajos que ejercen «autoridad pública» y, por ello, piensa que todas aquellas tareas rutinarias que en pocos años desaparecerán deberían sustituirse por contratos laborales.

«Tiene sentido que un juez sea funcionario, pero no hace falta serlo para abrir puertas», pone Moles como ejemplo, aunque matiza que, en todo caso, si se cambia el sistema de personal de las administraciones, se tendría que hacer poco a poco y respetando los derechos adquiridos.

La crisis pandémica demostró, según el profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) Ramón J. Moles, que las administraciones españolas son «muy frágiles» ante las adversidades y que «con pequeños cambios, cae toda la estructura», remarca.

Moles relata que su decisión de escribir «Derecho administrativo en colores» surge a raíz de su profesión: «Hace tiempo que reflexionaba sobre la utilidad de mi trabajo docente, pensando sobre si la administración estaba haciendo las cosas como debería».

Cuando explotó la pandemia de la COVID-19, y al ver, dice, el caos que hubo por ejemplo para conseguir mascarillas o respiradores, Moles «organizó» sus ideas: «Vi un Derecho Administrativo que no era operativo en situaciones excepcionales».

La crisis pandémica demostró, según el profesor, que las administraciones españolas son «muy frágiles» ante las adversidades y que «con pequeños cambios, cae toda la estructura», remarca.

Intentando buscar una solución a esa fragilidad, en el libro critica la separación estricta que se hace entre lo público y lo privado, y propone introducir en las administraciones un nuevo concepto, el «procomún», que se refiere a cuestiones que están en terrenos ambiguos sobre si son públicos o privados.

Pone como ejemplos del «procomún» el derecho a la tranquilidad, la lengua, la cultura popular o la artesanía, pero también la «soberanía energética» y sectores económicos que son «esenciales» para el funcionamiento del país.

«En la crisis de la COVID no sabíamos dónde encontrar mascarillas o respiradores, y es porque hemos dejado que se fabriquen muchas necesidades fuera de España simplemente porque era un poco más barato hacerlo en el extranjero e importarlo, pero eso nos ha hecho tremendamente débiles», critica el profesor.

Con ello, propone crear organizaciones que aúnan sector público y privado, en colaboración, compartiendo riesgos y beneficios: «En los Estados Unidos todas las agencias federales son muy parecidas a la estructura empresarial, y eso les da, por ejemplo, la capacidad de contratar profesionales de calidad muy valorados en el mercado de trabajo».

«Tenemos que buscar fórmulas que nos permitan encontrar lo mejor del mundo público y del privado y que eliminen los peores problemas de ambos», reivindica Moles.

El «Sandbox», posible solución

El profesor incide en su libro sobre la tendencia de la administración de evitar riesgos impidiendo acciones: «Muchas veces, por simple desconocimiento de cuál es la causa de algún efecto, se impide que el sector privado se desarrolle».

Eso pasa, por ejemplo, con las antenas telefónicas, que reciben un gran rechazo por supuestamente generar cáncer, aunque, recuerda Moles, no hay evidencia de tal relación.

Para afrontar los retos del siglo XXI, en el que las innovaciones tecnológicas exigen gran flexibilidad, Moles propone un sistema para gestionar los riesgos, el «Sandbox» o caja de arena, que pretende dar un espacio legal para que, en periodo de prueba, se desarrollen proyectos que pueden tener ciertos riesgos.

Es un método usual en el derecho anglosajón: «La lógica del Sandbox es proteger en un inicio a consumidores e inversores, evaluar los proyectos de cerca y sacarlos de la caja de arena si son fructíferos».

Moles reivindica que el Derecho Administrativo tiene que innovar en sus formas, para así adecuarse a ámbitos punteros de la economía: «El Derecho debe ser más humilde y saber cuándo está dejando de ser servicio para convertirse en estorbo». EFE

Noticias Relacionadas: