TAP se deja querer por IAG y Air France

La aerolínea portuguesa TAP consideró hoy que el interés manifestado por el grupo hispano-británico IAG, matriz de Iberia, British Airways y Vueling, y por Air France en la reprivatización de la compañía lusa son «noticias positivas».

«Todos deberían estar muy felices y orgullosos de ver que actores externos están interesados en esta organización», dijo la consejera delegada de TAP, Christine Ourmières-Widener, durante la rueda de prensa de presentación de los resultados del tercer trimestre.

Ourmières-Widener respondió así a las recientes muestras de interés dadas por IAG y por Air France en la reprivatización de TAP y defendió que muestran el «valor» que tiene la aerolínea lusa.

Aun así, no quiso comentar sobre posibles ofertas y recordó que la decisión final no está en manos de la administración de TAP.

El Estado portugués tiene actualmente en sus manos el 100 % de la aerolínea, después de aumentar su presencia en el capital para salvarla tras los daños sufridos por la pandemia.

El grupo recibirá en total ayudas públicas que rondan los 3.200 millones de euros, a cambio de un plan de reestructuración con reducciones de plantilla y ventas de activos no estratégicos.

El Gobierno luso tiene previsto lanzar un proceso de reprivatización para que la aerolínea pase a formar parte de un gran grupo de aviación, aunque por el momento de han desvelado pocos detalles.

Además de IAG y KLM/Air France, también estaría interesada Lufthansa.

CANCELACIONES EN NAVIDAD

La administración de TAP también comentó la noticia avanzada por los sindicatos de que la aerolínea va a cancelar cerca de 400 vuelos entre noviembre y diciembre, pero aseguró que la cifra todavía no está cerrada.

Las cancelaciones se deben al aumento de las bajas de maternidad y paternidad marcadas para esas fechas (unas 300, un 10 % más que el año pasado) y a la migración del sistema de control del tráfico aéreo en Francia, según la consejera delegada.

«Es difícil para nosotros porque tenemos que gestionar algo sobre lo que no tenemos control», señaló Ourmières-Widener, que aseguró que quieren tomar la decisión sobre las cancelaciones «lo más rápido posible».

TAP anunció este miércoles pérdidas de 90,8 millones de euros hasta septiembre, una mejora del 85,5 % en comparación con el mismo periodo de 2021 y a pesar de que en el tercer trimestre tuvo beneficios de 111,3 millones.

El responsable financiero de la aerolínea, Gonçalo Pires, explicó que las pérdidas en el acumulado se deben en gran parte al peso de la deuda y de sus intereses.

TAP ha subido las tarifas de media un 23 % en estos nueve meses, debido al aumento «brutal» de los costes de combustible, que se han multiplicado casi por cuatro.