Telefónica frena la salida a Bolsa en Argentina

Telefónica no sacará, de momento, su filial argentina a Bolsa, una operación esperada por el mercado, mientras su precio lucha por no perder los 8 euros. Telefónica registra su peor semana desde marzo, perdiendo un 4,5% en Bolsa.

La operadora presidida por José María Álvarez-Pallete ha recibido dos duros informes de Morgan Stanley y Bank of America Merrill Lynch, según el Confidencial, que dan al traste con la pretensión de sacar a Bolsa la filial argentina. En ellos apuntan que es imposible colocar acciones de una compañía Argentina entre inversores extranjeros.

El mercado ya ha comenzado a descontar esta situación, con la acción de Telefónica en la zona de los 8 euros por título, una caída del 4,5% respecto a los 8,35 euros con los que cerró la pasada semana. Es el peor comportamiento, hasta ahora, en una sola semana desde finales de marzo, cuando cayó cerca de un 5%.

Telefónica gafada en sus salidas a Bolsa

Telefónica tiene gafadas las salidas a Bolsa en los últimos años. Primero se intentó con Telxius, la división de cables submarinos, que finalmente tuvo que cancelar para vende el 40% al fondo KKR, para ingresar 1.275 millones de euros. La operadora tenía preparada toda la operación, pero las condiciones del mercado y la presión de los inversores para bajar los precios la hicieron inviable.

Lo mismo ocurrió con O2, la filial británica, tras la fallida venta al fondo Hutchison Whampoa. La filial británica aún está en estudio de o bien trocearse o bien sacarla a Bolsa, pero el Brexit y la libra aún no dan síntomas de apaciguar al mercado.

Ahora se suma la filial argentina, uno de los países con mayor negocio para Telefónica. El país atraviesa una difícil situación macroeconómica, más cuando está pidiendo dinero al FMI y otros organismos internacionales para hacer frente a próximos vencimientos de deuda. El país se está enfrentando así a los fantasmas del pasado, como la posibilidad de un corralito.

El Gobierno de Macri ha pedido 30.000 millones en su negociación con el FMI. «No van a ser gratis», según afirma uno de los bancos estadounidenses, más cuando los acuerdos en el pasado se dieron a cambio de fuertes reformas. En 2001, se acabó llegando a un corralito, y huida de inversores extranjeros. Macri tendría que aumentar impuestos, como ya ha hecho con el llamado «tarifazo», recortes y por tanto respuestas sindicales en las calles, que derivarán en una huelga general. Por su parte, los intereses en Argentina se sitúan en el 40%, con una inflación del 25%. Las empresas no han emitido deuda debido a esta situación.