Escapada invernal a Chequia, mercadillos y experiencias

Los días son más cortos y fríos pero los paseos por Praga se disfrutan el doble, las farolas inundan de amarillo las calles, la música contagia de entusiasmo a los transeúntes en los mercadillos navideños y las galerías y museos programan eventos y exposiciones sin parar. Viajar a la República Checa durante los últimos meses del año es un regalo para los sentidos.

Lejos de permanecer en un adormecedor letargo, la República Checa durante el invierno redobla su espíritu inspirador preparando en todos sus rincones un buen número de experiencias para los públicos más diversos. La agenda de actividades en la capital es tan extensa que necesitaríamos de muchas jornadas para conocerla por completo y si salimos a otros rincones del país tampoco faltarán propuestas de entretenimiento. 

De mercadillo en mercadillo

Si sois unos enamorados de los mercadillos, algunos de los más renombrados a nivel internacional están en Praga, incluso fueron considerados por la revista USA Today como los más bonitos del mundo. Desde el 26 de noviembre de 2022 y hasta el 6 de enero de 2023 es posible conocer el ambiente y la decoración de los mercadillos que se sitúan en la capital checa y que ofrecen una oferta común, aunque con matices, formada por música, puestos de artesanía y color, vino caliente y rollitos de canela. No dejéis de visitar los mercadillos que se colocan en la Plaza de San Wenceslao, la Plaza de Carlos, la Plaza de la República… y, sobre todo, el que centraliza los festejos, el mercadillo de la Plaza de la Ciudad Vieja. Allí es donde se sitúa un árbol navideño de gran tamaño que se convierte en el cómplice perfecto durante esta bonita época navideña.

Pero los mercadillos navideños no son patrimonio exclusivo de Praga sino que invaden los rincones más emblemáticos del país. Por su buena comunicación y ambiente festivo, es muy recomendable hacer una escapada exprés a destinos como Brno, Olomouc, Cesky Krumlov o Pilsen. 

Si eliges hacer una excursión a Brno no dejes de visitar el mercadillo de la Plaza de la Libertad de cuyos puestos emana un agradable aroma a ponche caliente, licor de miel y pastas de vainilla. Por sus escenarios pasan distintos grupos musicales que animan el ambiente, ¡por algo ha sido elegida “Ciudad Creativa de la Música” por la Unesco! En Pilsen, además de pasear entre los puestos, hay que visitar el “belén viviente” y entrar en la iglesia gótica de San Bartolomé donde es recomendable asistir a los conciertos de Adviento y subir a la torre para ver la ciudad con iluminación navideña. 

Y si quieres conocer hasta dónde llega la creatividad en los ponches navideños, localiza en tu mapa la ciudad de Olomouc. Su ingeniosa elaboración se ha convertido en todo un fenómeno, los encontrarás dulces, amargos, con ron, naranja, diversas especias… Y si no bebes, lo pasarás igualmente bien gozando de su animado ambiente, la pista de hielo y la música popular. Tampoco podemos olvidar Cesky Krumlov, cuyo encanto se ve redoblado durante la época de Adviento y donde organizan actividades tan originales como la navegación navideña en balsa o la entrega de las cartas al Niño Jesús.

Y si te quedas en Praga… 3 experiencias más

Si lo que te apetece es visitar Praga durante unos días y disfrutar de su ambiente, no te faltarán actividades en su amplia programación de ocio. Además de conocer la ciudad desde un punto de vista monumental visitando sus hitos históricos, te animamos a gozar de tres experiencias. 

Si te gusta patinar, no te pierdas la pista que se coloca junto al Teatro de los Estamentos, en la Ciudad Vieja. En este lugar se reúnen cada tarde-noche personas de todas las edades que muestran sus habilidades al ritmo de la música. No necesitas llevar tus propios patines porque te los alquilan allí mismo. Alrededor, además, hay puestos con delicias gastronómicas para endulzar aún más el momento.

La segunda experiencia que te proponemos es visitar los jardines del Castillo de Praga y acercarte al Mirador de Petřín para admirar desde las alturas la belleza de la ciudad nevada (o sin nevar). Aunque esta es una de las mejores vistas de la capital en invierno, también merece la pena recorrer en barco el río Moldava para ver la panorámica desde el agua.

Por último, te sugerimos reservar tiempo para disfrutar de la gastronomía checa en restaurantes tan emblemáticos como U Modré Kachničky (El Pato Azul) o el elegante Next Door by Imperial. Y si el tiempo no acompaña, tienes la excusa perfecta para realizar una ruta por los cafés históricos praguenses. Toma nota de los cafés Savoy, Louvre, Slavia, Imperial y Grand Café Orient. Todos ellos son ideales para hacer un alto en el camino y saborear alguna de sus deliciosas tartas.