España vende el Príncipe de Asturias como chatarra con el acero en mínimos

La Armada ha conseguido adjudicar el portaaviones Principe de Asturias después de que a principios de este fuera subastado sin éxito tres veces consecutivas, por falta de ofertantes. El precio reclamado inicialmente fue de 4,8 millones de euros y tras rebajar su exigencia a solo 2,9 millones, tampoco aparecieron posibles compradores.

Finalmente, han logrado venderlo por poco más de 2,4 millones de euros. El comprador es la empresa ‘Surus Inversa‘, que ya desguazó en 2014 un petrolero español de la Flota Marqués de la Ensenada en Turquía. De las tres ofertas presentadas, una era española, otra turca y otra (la ganadora) hispano-turca. La normativa vigente prohíbe que los buques de guerra sean desguazados en países que no pertenezcan a la UE o la OTAN, como Bangladesh.
El Ministerio de Defensa dio de baja este portaaviones en 2013, con solo 25 años de antigüedad, por el alto coste de su mantenimiento, que ascendía a unos 30 millones de euros al año.

Caída en picado del precio del acero

En 2014, ante la dificultad para vender el portaaviones a otros países por la necesidad de «infraestructuras y adiestramiento» que requiere el barco, la Armada consideró que la mejor solución sería venderlo al peso.

Sin embargo, fueron excesivamente optimistas con esa transacción, y calculaban que el Gobierno podría llegar a embolsarse entre 20 y 30 millones de euros con el desguace del Principe de Asturias; pero el precio del acero, que llegó a máximos en 2008 con un coste de 1.135 euros por tonelada, ha caído en picado.

Cuando la Armada anunció la primera subasta del barco, el acero marcaba un precio de 178,6 euros por tonelada. Tras varias rebajas en el precio, fue el Gobierno de España quien tuvo que declarar la subasta desierta a finales de marzo. El precio del acero en ese había caído un 60% hasta, los 69,5 euros por tonelada, el valor más bajo en los últimos ocho años.
La caída del coste de este material viene alentada por China, un país que ha pasado de demandarlo a convertirse en el mayor productos de acero barato. El país fabrica lo mismo que el resto de potencias juntas.