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ETA ingresó 40 millones de euros extorsionando a 10.000 personas

ETA ingresó 40 millones de euros extorsionando a 10.000 personas

14 marzo, 2017
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Actualizado: 14 marzo, 2017 17:07
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Un estudio realizado por la Universidad de Deusto desvela que ETA logró recaudar mediante chantaje a través de cartas y que afectó a entre 10.000 personas 21 millones de euros entre 1980 y 1986 y otros 9 millones en su última década, entre 2001 y 2011.
La banda obtuvo unos cinco millones de euros anuales en los años 70 y 80 de empresarios a los que la organización terrorista extorsionaba. A ello hay que sumarle lo que obtuvieron con los secuestros, unos 100 millones de euros.
«Misivas del terror, análisis ético-político de la extorsión y violencia de ETA contra el mundo empresarial», una investigación impulsada por el Centro de Ética Aplicada de la Universidad de Deusto, ha explicado que mediante la extorsión ETA tenía unos presupuestos anuales de entre 4,5 y 6 millones de euros en los años 70 y 80, y unos 2 en los años 2000.
Los terroristas ingresaron 19,2 millones en atracos y entre 101 y 104 millones con raptos entre 1973 y 1996, a los que hay que sumar 700.000 euros más de los secuestros exprés de a partir del año 2000.
Según el estudio, entre un 5% y un 13% de empresarios cedieron a la extorsión, y algunos expertos señalan que los daños en la economía vasca fueron superiores a los provocados por la crisis.  En una de las cartas que envió ETA a uno de estos empresarios difundía así el terror: «Euskadi ta Askatasuna se dirige a Ud. para reclamarle una ayuda económica de diez millones de pesetas. Para abonar dicha cantidad debe dirigirse a los círculos abertzales habituales manteniendo una discreción extrema y absteniéndose de poner en conocimiento de cualquier cuerpo policial la existencia de la relación entre ETA y Ud. El no responder positivamente a esta petición le haría acreedor de las medidas que ETA decida aplicar contra Ud. y sus bienes».
El asesinato del empresario guipuzcoano, José María Korta, vinculado al PNV, en agosto de 2000, implica un repunte en el cobro de extorsiones por el pánico que genera.

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