Experto de ONU recomienda a España un «equilibrio» entre ajustes y derechos

Bruselas, 3 jun.- Juan Pablo Bohoslavsky, experto independiente del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, aconsejó hoy a España y a los demás países europeos que mantengan «un equilibrio» entre los objetivos macroeconómicos y la vigencia de los derechos humanos por el impacto de los ajustes en la sociedad.

«Esto lo digo para que los derechos humanos sean ampliamente respetados y nadie se quede atrás», señaló en un encuentro con medios para presentar su informe preliminar sobre las reuniones que ha mantenido en Bruselas con diferentes agentes políticos, económicos y sociales sobre el impacto de las políticas de austeridad y los ajustes económicos en las sociedades europeas.

El experto argentino en derecho criticó el enfoque «desproporcionado» de los países europeos en favor de la estabilidad presupuestaria, en detrimento de los sistemas de protección social y los derechos humanos.

En declaraciones a Efe, Bohoslavsky destacó Islandia como ejemplo de buenas prácticas en materia de política fiscal y coste social.

Aconsejó al Gobierno español que se forme tras las elecciones del 26 de junio «mantener un equilibrio entre los objetivos macroeconómicos y la vigencia de los derechos humanos».

Esta recomendación no es única para España, sino que vale también para el resto de países, añadió.

Bohoslavsky destacó en una rueda de prensa que las recientes políticas adoptadas por algunos países miembros de la Unión Europea (UE) están golpeando a los sectores más vulnerables de la sociedad, sobre todo «al sistema público sanitario y a los sistemas de protección social».

«Existe actualmente un enfoque general desproporcionado en favor de la estabilidad presupuestaria», y las modificaciones fiscales podrían incluir «impuestos progresivos» y «lucha contra la evasión de impuestos», recomendó.

El experto aseguró que «la economía debe servir a la sociedad, y no viceversa» en un contexto europeo en el que 121 millones de personas sufren riesgo de pobreza y exclusión social, más de 4,7 millones más que en 2008.

Bohoslavsky sostuvo que el número de personas en riesgo ha aumentado especialmente en Grecia, Italia y España, y los niños y las mujeres son el colectivo más golpeado (27,8 % y 25,2 %, respectivamente).

En el caso de los refugiados, su análisis no fue objeto concreto de esta misión.

Sin embargo, Bohoslavsky afirmó que este sector «no es muy diferente de otros vulnerables como niños, mujeres o personas discapacitadas» desde el punto de vista del impacto económico en los derechos humanos. EFE