Carlos Torres, presidente del BBVA, responde a Díaz, Maroto y Belarra

El Gobierno no ha dejado escapar la oportunidad de justifica su política de impuestos especiales a la banca o su intento de controlar el mercado a través de los precios tras el beneficio récord del BBVA. Hasta tres ministras, Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo, y aspirante socialista a la Alcaldía de Madrid, e Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 y secretaria general de Podemos, han criticado esos resultados. El presidente del BBVA, Carlos Torres, ante esas críticas, cree que los resultados «tan buenos» de la entidad, de récord, se pueden malinterpretar si se piensa solo en los 6.420 millones de euros -un 38 % más- y se pasa por alto que la rentabilidad del negocio sigue siendo muy baja, al igual que la cotización en bolsa.

De hecho, ha insistido en la rueda de prensa de presentación de las cuentas que otra de las razones de este crecimiento es la diversificación geográfica, ya que el beneficio en España crece un 8,4 % y la rentabilidad del negocio, a pesar de que los tipos de interés hayan subido, sigue estando por debajo del coste de capital.

Además, el banquero ha recordado que el banco ha tenido en España varios años de pérdidas y ahora se da una recuperación ayudado por la normalización de los tipos (de interés) tras una década y media de tipos bajos e incluso negativos.

«Hay que mirar de dónde venimos; la composición del beneficio fuera de España y hay que fomentar que las empresas tengan un negocio sostenible. La banca no está en esa situación», ha resumido.

Pero después de que la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, afeara esta mañana que la crisis no puede ser excusa para que los bancos ganen más y haya reclamado congelar hipotecas y moderar beneficios, el presidente del BBVA ha querido aclarar que la actividad empresarial no está reñida con la sociedad.

Es más, en su opinión, considera que los intereses de las empresas y la sociedad coinciden, ya que son precisamente los beneficios empresariales los que conducen «a la inversión que crea empleo y bienestar a largo plazo».

EXPERIENCIAS CATASTRÓFICAS

A juicio del presidente del BBVA, la labor de las empresas es «insustituible» y la historia está llena de experiencias en las que se sustituyó a la empresa y «el resultado fue catastrófico».

Que la empresa tenga un objetivo de hacer inversiones rentables es esencial para que la economía funcione en España, en Europa y en el mundo occidental, ha añadido.

Por eso, a pesar de las críticas del Gobierno, incluidas las de la ministra de Igualdad, Ione Belarra, quien ha considerado que la banca no puede tener «beneficios extraordinarios» cuando la gente «lo pasa realmente mal», el banquero confía en que España seguirá defendiendo la economía de mercado y el papel que juegan las empresas.

«Especialmente teniendo en cuenta los retos de España de descarbonización y digitalización», para los que, en opinión del presidente del BBVA, es importante la colaboración pública y privada.

En cualquier caso, ha insistido que entiende que en un contexto de inflación los más perjudicados sean las familias más vulnerables y por ello el banco ha adoptado medidas para ayudar a esos colectivos, que van más allá del Código de Buenas Prácticas impulsado por el Gobierno.

También ha recordado el acuerdo del sector para que los salarios de los empleados de banca suban un 4,5 % este año.

EL IMPUESTO EXTRAORDINARIO: 225 MILLONES

Respecto al impuesto extraordinario al sector aprobado por el Gobierno, Torres ha insistido en su idea de que es «contraproducente», «entorpece la actividad económica y que fluya más fácil el crédito», pero aún así abonarán los 225 millones que le corresponden este año.

Lo que no ha querido desvelar es si a renglón seguido recurrirán ante los tribunales.