Hernández de Cos pide cautela y prudencia a la banca
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha pedido a la banca que sea «muy cuidadosa» con su política de provisiones y su planificación del capital en los próximos trimestres, ya que aunque la situación de partida del sector es positiva, es preciso que se extreme la prudencia.
Durante su intervención en el V Foro Banca organizado por elEconomista, ha subrayado que nos encontramos ante un contexto macrofinanciero «muy complejo», marcado por la pandemia, la invasión de Ucrania por Rusia, la inflación, el endurecimiento de las condiciones de financiación y una elevada incertidumbre que han obligado a revisar a la baja las previsiones de crecimiento y aumentado los riesgos de entrar en una fase recesiva global.
PIDE PRUDENCIA AL SECTOR BANCARIO
Aunque la situación de partida del sector bancario resulta positiva, el gobernador ha insistido en que es preciso que se extreme la prudencia y se haga un seguimiento «minucioso» de los riesgos, que pueden experimentar una evolución adversa de forma rápida y obligar a plantear nuevos escenarios.
Entre las fortalezas de la banca, ha destacado que la calidad de los balances ha continuado mejorando, la tasa de dudosos de los préstamos bancarios al sector privado volvió a registrar mínimos, los préstamos en vigilancia especial (que muestran algún potencial deterioro) también han intensificado su ritmo de corrección y las refinanciaciones se han reducido.
Además, ha apuntado que la rentabilidad del sector bancario ha continuado mejorando en la primera mitad del año, las entidades están comenzando a repercutir en los nuevos préstamos el aumento de los tipos de interés, aunque de forma mucho más lenta que en el pasado, las primas de riesgo también se están ampliando y por el momento los tipos de interés de los depósitos no han aumentado y no se detecta un trasvase de fondos significativo hacia las cuentas a plazo.
Hernández de Cos también ha destacado la solvencia de la banca, con unos colchones de capital por encima de los requisitos regulatorios, aunque inferiores a los del resto de los principales países europeos.