El futuro presidente del FROB aboga por ‘maximizar’ la participación en Caixabank
El futuro presidente del FROB, Álvaro López Barceló, ha defendido un fondo europeo de garantía de depósitos y ha abogado por avanzar en la unión bancaria, al tiempo que ha apostado por seguir una estrategia que permita obtener el mayor retorno de la participación pública en CaixaBank y en la Sareb.
Durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados, el candidato propuesto por el Gobierno a la presidencia del FROB no ha querido profundizar sobre algunas cuestiones planteadas por los distintos grupos parlamentarios hasta que acceda a su cargo.
Sin embargo, ha aclarado que el futuro de la participación del Estado superior al 17 % en el capital de CaixaBank pasa por su venta antes de diciembre de 2025, el plazo actualmente en vigor, ya sea una o varias desinversiones, pero siempre con la idea de maximizar la recuperación de las ayudas públicas.
López Barceló ha reconocido que de los cerca de 54.500 millones inyectados a la banca, «solo se ha recuperado una parte reducida de estas ayudas», y no ha querido aventurar cuánto podrá conseguir, algo que dependerá, ha dicho, de la venta de la participación en CaixaBank.
Barceló asegura que el FROB, presente en el capital de Caixabank, no interviene en la gestión
El próximo presidente del FROB ha dejado claro también que el Estado, aunque esté representado en el consejo de administración de CaixaBank, no interviene en las decisiones de la entidad, ni sobre su política comercial ni sobre su sede, después de que varios diputados preguntaran por ello.
En cuanto a la Sareb, el banco malo, López Barceló ha señalado que la estrategia del FROB busca maximizar el valor económico y social de los activos de la compañía, con tres líneas estratégicas de actuación: la venta de activos para obtener ingresos con los que reducir su deuda, la actividad social y la generación de valor con una gestión especializada.
El candidato a la presidencia del FROB ha recordado que la Sareb llevará a cabo la movilización de unas 50.000 viviendas sociales, a través de un programa de alquiler de 14.300 viviendas ya ocupadas, la cesión de terrenos para construir 15.000 viviendas en colaboración público y privada y la entrega de 21.000 viviendas vacías a las administraciones.
Por otro lado, en aras de defender su independencia en su futuro cargo, ha recordado que con ese mismo fin el mandato es de 5 años no renovables, además de que el FROB cuenta con una comisión rectora que vela por su propia autonomía.