La banca europea seguirá robusta pese al virus, según Standard and Poor’s
La agencia de calificación Standard and Poor’s (S&P) prevé que la banca europea continuará, por lo general, robusta a nivel de capital a pesar del impacto económico vinculado a la pandemia del coronavirus, una crisis que incrementará, no obstante, el nivel de pérdidas registradas en 2020.En su informe, que estudia los posibles efectos de la pandemia en el sector, los analistas insisten en que aún es pronto para alcanzar conclusiones, aunque reconocen que las medidas de confinamiento, cada vez más extendidas en la región, empeorarán los indicadores económicos como antesala de un segundo trimestre «realmente nefasto».
En sólo unas semanas, la pandemia ha cambiado «por completo» el panorama económico europeo, señala la firma, que explica que «aunque parezca que haya pasado una era, la desaceleración económica y la volatilidad del mercado surgieron bastante tarde» en estos tres primeros meses.
«Si bien los resultados de los bancos europeos en el primer trimestre podrían desvelar aspectos importantes acerca del impacto que ha tenido el parón económico en buena parte de Europa, esperamos que los comentarios de los respectivos equipos gestores sean más reveladores», sostiene el analista de crédito de S&P, Osman Sattar.
En este sentido, el trabajo destaca cómo la expansión del virus y las «incertidumbres excepcionales» que existen en torno a las estimaciones, ha causado cierto retraso en los informes trimestrales de los bancos.
Una situación que contrasta con la voluntad de los inversores, que permanecerán «alertas» en los próximos dos años, buscando pistas sobre rentabilidad, liquidez y capitalización en medio de un contexto de «incertidumbre significativa».
A efectos contables, la pandemia hará que la mayoría de los bancos europeos apuesten por las reestructuraciones o refinanciaciones de deuda, y que se planteen preguntas sobre cómo provisionar los préstamos de conformidad a la normativa.
Con todo, los expertos no consideran que estas políticas de reestructuración y refinanciación de préstamos sean indicativo de un «fuerte aumento» en las futuras pérdidas crediticias.
Eso sí, avisan, «las pérdidas inevitablemente aumentarán en 2020, y la transparencia de los bancos en la presentación de sus informes será importante para la confianza de sus clientes».
El informe también resalta cómo muchos bancos, aplicando las recomendaciones de los reguladores, han reajustado sus políticas de dividendo y los planes de recompra de acciones.
Respecto a la capitalización de las entidades europeas, los analistas entienden que, conforme avance el año, «se mantendrá, en líneas generales, robusta» a pesar de que las ratios de solvencia puedan descender.
De este modo, «probablemente, los inversores comenzarán a ver más ratios de capital de máxima calidad CET 1 alrededor del 12 % y menos alrededor del 13 %», concluyen.