Los 2.500 millones que Sánchez pretende hurtar a las españoles en beneficio de la Cataluña de Torra
Los 2.500 millones que debe Hacienda a las autonomías es por la liquidación del IVA de 2017 que el Gobierno de Sánchez no quiere hacer efectivo porque necesita ese dinero para satisfacer las demandas del inhabilitado presidente de Cataluña, el separatista Quim Torra. Así lo pactaron esta semana en Barcelona. El resto de España queda en el olvido.
El secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de «meter la mano en el bolsillo de los españoles para llenar la cartera de Torra» con la financiación autonómica y pagar así los «chantajes» de los independentistas.
García Egea ha señalado que le van a decir «muy claro» a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que no van a tolerar este tipo de «atropellos», como compensar el pago del IVA que debe el Gobierno con deuda del FLA.
Según ha manifestado en una rueda de prensa, el Gobierno quiere «hurtar» los 2.500 millones que debe a la comunidades autónomas de la liquidación del IVA de 2017 y lo hará para pagarle al presidente catalán, Quim Torra, sus «embajadas» y la TV3.
Algo que el PP no piensa consentir, así como tampoco una armonización de impuestos entre las autonomías que suponga un incremento de la presión fiscal.
«Por cada impuesto que nos obliguen a subir nuestras comunidades van a bajar uno», ha afirmado García Egea, quien ha garantizado que utilizarán todos los «recursos jurídicos y técnicos para impedirlo».
También ha instado a los barones socialistas como el aragonés Javier Lambán, o el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, a que digan si están por «bailarle el agua» a Sánchez o se sitúan al lado de los ciudadanos en esta cuestión de la financiación autonómica que «no tiene colores políticos».
El número dos del PP ha recriminado que el conseller de Economía y Hacienda de la Generalitat, Pere Aragonès, no va a asistir a la reunión de esta tarde porque ayer Sánchez y Torra despacharon de forma «unilateral» sobre la financiación a Cataluña en lo que ha denominado «cumbre de la reverencia».
Por eso, ha enviado desde el PP un «mensaje claro» a Sánchez de que este partido no quiere que haga una reverencia a sus presidentes autonómicos, sino que «pague lo que debe» para mantener los servicios públicos de las comunidades autónomas.