Los inspectores de Hacienda demandarán la nueva promoción interna al favorecer ‘el amiguismo, el nepotismo y la politización’

 Los inspectores de Hacienda del Estado se han manifestado este miércoles, por primera vez en su historia, contra el nuevo sistema de promoción interna y han avanzado que preparan una demanda contra este cambio normativo.

La asociación de inspectores de Hacienda del Estado (IHE) ha reunido a tres centenares de inspectores ante el Ministerio de Hacienda -según los organizadores- bajo el lema «En defensa de lo público: por una Administración cualificada y no politizada».

La reforma del sistema de promoción interna dentro de la Administración, hacia uno menos memorístico y más centrado en la experiencia y las capacidades, ha chocado con el rechazo frontal de los cuerpos superiores de funcionarios, entre ellos los inspectores de Hacienda.

El presidente de la asociación de inspectores, Ransés Pérez Boga, ha indicado en declaraciones a los medios que sus abogados ya han redactado una demanda contra la reforma del sistema de promoción interna, que se presentará previsiblemente el próximo viernes en los juzgados de los contencioso-administrativo.

«Esta reforma va en contra de los principios de mérito y capacidad» para acceder a la función pública, ha asegurado, lo que supone un «daño» para la sociedad, la administración y el propio colectivo de inspectores.

Más allá de la demanda, Pérez Boga ha asegurado que la concentración es «en defensa de lo público», porque el nuevo sistema de acceso a la función pública supone una «reducción radical» de los contenidos e introduce criterios «subjetivos» en la promoción interna, lo que facilita «el amiguismo, el nepotismo y la politización».

«Esta reforma es lesiva porque la reducción en la exigencia del nivel de cualificación de los funcionarios va a determinar unos peores funcionarios y unos peores servicios públicos», ha añadido, al tiempo que ha afeado que no se haya hablado con el colectivo.

La vicepresidenta de la asociación, Ana de la Herrán, ha criticado que la reforma pretende «demoler» el actual sistema de selección de funcionarios, que «ha funcionado muy bien» porque está basado en la excelencia.

«No estamos en contra de la promoción interna», ha puntualizado Pérez Boga, pero esta debe ser «fluida» y no «a base de rebajar conocimientos», porque el objetivo es formar a los funcionarios para que puedan ofrecer los servicios públicos con «excelencia».

Los inspectores van a entregar a la ministra, María Jesús Montero, 1.500 firmas pidiendo la retirada de la reforma, representativas del 75 % del cuerpo de inspectores, que, ha subrayado el presidente de la asociación, «en la crisis de la pandemia hemos estado al pie del cañón».

Asimismo, ha avanzado que los inspectores valoran «nuevas figuras de presión» si no consiguen sus objetivos, aunque por el momento no barajan la huelga.