Los productores dan por hecho que los precios de los alimentos serán aún más caros
Los productores dan por hecho que en el futuro los precios de los alimentos seguirán más caros que antes y que solo bajarán cuando disminuyan los costes de producción, considerados la causa de la actual inflación.
Así lo han manifestado este viernes los representantes de las principales organizaciones agrarias en su intervención en la jornada dedicada al sistema alimentario español y organizada por el grupo popular en el Congreso de los Diputados.
El presidente de Asaja, Pedro Barato, ha sostenido que la inflación en la alimentación «viene para quedarse» porque «no es una cuestión de precios, sino de costes», que ha estimado que no disminuirán en el sector agrario mientras haya subidas como la del salario mínimo interprofesional.
Se ha mostrado en contra de las estrategias comunitarias que buscan reducir el impacto ambiental de la alimentación y ha vaticinado una reducción de la producción agrícola, el aumento del gasto de los consumidores, el descenso de las exportaciones, el incremento de las importaciones y un menor Producto Interior Bruto (PIB), entre otros efectos.
Barato ha pedido más inversión en investigación y digitalización, fondos de la Política Agraria Común (PAC) y actuaciones contra la sequía.
El secretario general de COAG, Miguel Padilla, ha destacado que los alimentos se han encarecido por los mayores costes de producción y las malas condiciones meteorológicas, que han ocasionado una merma en la oferta de muchos productos.
Ha subrayado que en 2022 se ha perdido un 8,7 % de la renta agraria y ha dudado de que los costes de producción varíen mucho en 2023, un problema agravado por la guerra en Ucrania.
«Los precios no van a volver hacia atrás», ha señalado Padilla, que ha pedido soluciones para aumentar el poder adquisitivo de los consumidores «sin distorsionar la cadena».
El secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, ha instado a «terminar con los intermediarios» y evitar las campañas de precios a la baja que en muchos casos han llevado a la venta a pérdidas.
Ha vuelto a defender la ley de la cadena alimentaria y los últimos cambios introducidos, como el registro de contratos y la publicación de las sanciones.
«La ley se tiene que cumplir y pedimos a la industria y la distribución absoluta transparencia», ha apuntado Ramos.
El director financiero de Cooperativas Agro-alimentarias, Tomás Rojas, ha llamado a estructurar mejor el sector y ha añadido que, si no se remedia la situación, en la cadena «habrá más desequilibrios porque las producciones bajarán y el coste al consumidor se incrementará más».
Ha advertido de las dificultades de emprender en el campo y del abandono de las explotaciones sin relevo generacional, así como del riesgo de la entrada de los fondos de inversión en cultivos rentables de regadío cuando la mayor parte de la superficie agraria de España es de secano.