Los reyes se someten a la prueba del coronavirus tras los dos besos de Letizia a Irene Montero

Los reyes se han sometido este jueves al test de coronavirus como medida de prevención indicada por las autoridades sanitarias y sus resultados serán comunicados públicamente, ha informado la Casa Real.

La decisión se ha adoptado en función de las recientes actividades públicas que han mantenido.  En realidad es una en concreto. El acto al que asistió la Reina Letizia con la ministra de Igualdad, Irene Montero, que ha dado positivo en la prueba del coronavirus.

Letizia estuvo con Irene Montero el pasado viernes en un acto de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (Apramp).

Letizia presidió una mesa de trabajo de esta asociación que tuvo lugar en el centro de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) del madrileño barrio de Lavapiés y en el que ha estuvo acompañada por la ministra de Igualdad, Irene Montero.

Fue el primer acto en el que Montero ha acompañado a la reina desde la creación del Gobierno de coalición presidido por Pedro Sánchez.

A su llegada, Letizia tuvo un contacto dierecto con Irene Montero al estrechar la mano de la ministra, quien se sentó después a su derecha durante la reunión y de la que se despidió con dos besos al finalizar el encuentro. Ahora la Casa Real, tras tan efusiva despedida que no respetó el protocolo establecido por las autoridades políticas y sanitarias por el coronavirus, se teme lo peor. Aún no se conocen los resultados de la prueba, aunque la Casa Real se ha comprometido a hacerlos públicos.

El pasado miércoles, cuatro días después del encuentro de Letizia con Irene Montero, el presidente de Francia, Emmanuel Macron; su esposa, Brigitte, y los reyes de España mantuvieron un encuentro con víctimas de atentados terroristas, como colofón al homenaje celebrado en París con motivo del Día Europeo que recuerda a este colectivo.

La reunión, que se prolongó cerca de una hora, tuvo lugar en el Teatro Nacional de Chaillot, situado junto a la plaza de Trocadero, donde Macron y Felipe VI protagonizaron el acto central de la jornada.

En la cita, participó una veintena de huérfanos de víctimas del terrorismo y algunos familiares de fallecidos en los principales ataques sufridos en Francia en los últimos años, como los cometidos en París en noviembre de 2015, con tres ataques simultáneos, uno de ellos en la sala de conciertos Bataclan.