Mapfre, atenta a las oportunidades de forjar alianzas en bancaseguros

El presidente de Mapfre, Antonio Huertas, ha dicho hoy que la aseguradora continuará pendiente de las oportunidades de negocio que surjan en el mercado de bancaseguros, aunque considera que ya está «muy definido» y que la mayor parte de las fusiones «lógicas» entre entidades ya se han producido.

Durante su intervención en el II Observatorio Financiero organizado por El Español e Invertia, Huertas ha recordado que mantiene alianzas de este tipo con Unicaja a través de Liberbank y CCM y con Bankinter, pero ha insistido en que Mapfre tiene una visión multicanal y cuenta, además, con 3.000 oficinas propias en toda España, que no paran de crecer, al contrario que la banca.

Esta red, que ha aumentado en 104 sucursales en los tres últimos años, ofrece un trato personalizado «muy apreciado por el cliente», que puede acceder además, al efectivo en sus cajeros automáticos y a gran cantidad de servicios financieros, gracias al acuerdo que mantiene con el Banco Santander, algo muy importante para las zonas meno pobladas, ha dicho.

También ha lamentado, como hizo ayer la presidenta de la patronal del seguro Unespa, que el proyecto de ley aprobado ayer por el Gobierno para impulsar los planes de pensiones empresariales no haya contado con el consenso de todas las partes implicadas: gobierno, empresas y sindicatos, y ha criticado que se perjudique al ahorro privado para beneficiar al empresarial.

Asimismo, Huertas ha confirmado que Mapfre continuará en el capital de la Sareb hasta 2026, porque es entonces cuando caduca la actual norma que establece que las inversiones de más de 20 millones de euros que no lleguen al 5 % del capital de una empresa no se pueden acoger a la deducibilidad fiscal de las pérdidas que sufran.

Por último, ha anunciado que la entidad de crédito creada con el Santander prepara el lanzamiento de una hipoteca inversa, un producto que le parece interesante, y que no tendrá objetivos muy ambiciosos, ya que aún hay algunas dudas sobre el capital que se pedirá a las aseguradoras para poder vender ese producto, entre otras cosas.