Nuevo patinazo de Yolanda Díaz: pide mantener una rebaja fiscal de IRPF que es permanente

La vicepresidenta segunda en funciones, Yolanda Díaz, que cuenta con una minoritaria participación en el Congreso, con 31 diputados, menos del 10% de los 350 totales, pide este jueves que se mantenga la bajada del IRPF para rentas inferiores a 21.000 euros brutos anuales y «prudencia» a la hora de evaluar la retirada del resto de medidas adoptadas para mitigar el impacto de la inflación. El problema de esa medida es que tiene carácter de permanente. Es decir, que en principio no hay nada que negociar. No propone, sin embargo, negociar deflactar la inflación en el IRPF de los sueldos, que tanto daño está haciendo a las clases trabajadores, y a lo que los socios del Gobierno, PSOE-Unidas Podemos, se niegan.

Fuentes del Ministerio de Hacienda han aclarado que la rebaja del IRPF a la que se ha referido Díaz ya tiene carácter permanente, por lo que no está encima de la mesa una posible retirada ni resulta necesario negociar su prórroga, al tiempo que han recordado que la medida beneficia al 50 % de trabajadores y supone un ahorro de unos 750 euros para un trabajador con un sueldo de 18.000 euros.

En declaraciones a los medios tras intervenir en el Comité Ejecutivo de la Confederación Europea de Sindicatos (CES-ETUC), Díaz ha abogado por mantener el «grueso» de las medidas adoptadas para compensar la pérdida de poder adquisitivo por el impacto de los precios y las subidas de los tipos de interés.

Yolanda Díaz dice que es «poco prudente» retirar medias de carácter fiscal, aunque la rebaja de IRPF para rentas inferiores a 21.000 euros que ella pide mantener tiene carácter permanente

«Nos parece poco prudente llevar una retirada completa de las medidas adoptadas», ha reclamado Díaz, que ha citado expresamente mantener esa medida fiscal y se ha mostrado partidaria de revisar otras como los incentivos o bonificaciones para la compra de vivienda.

Entre las medidas adoptadas está la rebaja del IVA del gas, aunque solo el natural, dejando fuera al butano y propano, y la electricidad, de algunos alimentos, dejando fuera a la carne, pescado o conservas, o los descuentos en transportes, que ya solo son de pequeña cuantía y solo para profesionales, mientras los ciudadanos vuelven a pagar altos precios por un litro de carburante donde la mitad de lo que cuestan son impuestos, impuestos por cierto, que suben conforme aumenta el precio de la gasolina o diésel.

«Seamos cautos, prudentes, formemos el Gobierno y mantengamos el grueso de medidas desgranadas», ha añadido la vicepresidenta y ministra de Trabajo, que ha agradecido el papel de los sindicatos en los avances logrados en la legislatura y ha prometido más avances en el próximo Ejecutivo de «coalición progresista liderado por Pedro Sánchez» en el que ya están trabajando.

«Ese nuevo Gobierno tiene sentido para ganar nuevos derechos laborales, para seguir avanzando, seguir subiendo el SMI, los salarios», ha añadido la también líder de Sumar, que ha añadido que actuarán sobre «los extensos margenes empresariales», la reducción de la jornada laboral o el despido.